El Ballet de la Ópera de Munich, dirigido por Ivan Liska, inaugurará la segunda parte del Festival Veranos de la Villa '09 con dos programas en el Escenario Puerta del Ángel.
La compañía interpretará, desde este viernes y hasta el 1 de agosto, 'Eugenio Oneguin' con coreografía de John Cranko y del 2 al 3 de agosto ofrecerá tres piezas de danza contemporánea de Simone Sandroni, Has Van Manen y Martin Schlapper.
El director artístico de la ópera resaltó hoy que ésta es la cuarta ocasión que visitan España y se alegró de que el público español haya ido evolucionando ya que antes sólo solicitaban piezas clásicas y ahora les piden que acerquen también algunas de sus propuestas de danza contemporánea.
En esta ocasión, el Ballet de la Ópera de Munich, que este año celebra el 20 aniversario de independencia respecto a la Ópera de la capital bávara, presentará el ballet de Cranko 'Eugeni Onegin', que al igual que la ópera de Tchaikovsky, estará compuesto por tres actos y seis escenas y está inspirado por el poema de Alexandre Pushkin.
LA BAILARINA LUCÍA LACARRA, LESIONADA
Entre los bailarines que encabezan el reparto se encuentran Lisa-Maree Cullum, Roberta Fernandes, Natalia Kalinitchenko, Alen Bottaini, TigranMikayelyan, Cyril Pierre, Luká Slavick. Ivy Amista, Valentina Divina, Séverine Ferrolier, Daria Sukhorukova, Zuzana Zahradníková, Marlon Dino (Oneguin), Norbert Graf son los bailarines solistas de esta historia de amor no correspondido entre Tatiana, una muchacha joven e inocente, y Oneguin, un cínico aristócrata que se da cuenta tarde de su error.
Liska puntualizó que la bailarina guipuzcoana Lucía Lacarra, "una de las principales figuras de su Ballet, sufrió una lesión en la rodilla en primavera de que se está restableciendo que le impedirá actuar en España como estaba previsto". En su lugar actuará la bailarina brasileña Roberta Fernandes, la primera bailarina del ballet, que la sustituirá en ambos programas.
El programa de contemporáneo estará integrado por tres coreografías. La primera de ellas será 'Cambio d'abito', de Simone Sandroni, un coreógrafo comprometido con la técnica de la improvisación. La pieza, sobre música de Johann Sebastian Bach, será interpretada por 40 bailarines que se cambiarán sucesivamente de vestimenta, puntualizó.
La segunda de las obras será 'Afagio Hammerklaver' del coreógrafo holandés Hans Van Manen sobre música de Ludwig van Beethoven. 'Violakonzert II' será la última pieza que interpretarán. Martin Schlapfer, "un joven coreógrafo alemán que dará mucho que hablar", firma esta coreografía creada a partir de la partitura de Sofia Gubaidulina 'Concierto para viola y orquesta'.
Liska adelantó que su ballet estrenará la próxima temporada en diciembre en el Opera House de Munich con una obra completa de Nacho Duato, que en alemán ha recibido el nombre de 'Tranquilidad y paz'. Liska resaltó que Duato también participara como artista invitado en la puesta en escena de su pieza que se incluye dentro de un programa dedicado a Bach.
Fuente: europapress
30 jul 2009
28 jul 2009
Corella Ballet en las Noches Mágicas de la Granja
El Corella Ballet Castilla y León abrirá el 1 de agosto la programación del Festival Noches Mágicas de la Granja. La cita será en el patio central de la Real Fábrica de Cristales de la Granja, a las 22.30 horas.
La compañía ofrecerá el estreno de tres coreografías: 'String Sextet' primera coreografía que el propio Angel corella crea para su compañía, 'Epimetheus' estreno internacional, creada por Russel Ducker, bailarín activo del Cuerpo de Baile del Corella Ballet y 'Fancy Free' coreografía de Jerome Robbins creada para el American Ballet en los años 40.
Venta de entradas: telentradas.com
Venta por teléfono: 902 10 12 12
Precio: De 20 a 50 euros
PROGRAMA:
“STRING SEXTET”
Coreografía: Ángel Corella
Música: Peter Ilyitch Tchaikovsky (Sexteto de Cuerda “Souvenir de Florencia” Op. 70, 1892)
Diseño de Iluminación: Diego Acera Bofarull
Duración: 21’ 24”
El único sexteto de cuerda compuesto por Tchaikovsky es una música rebosante de melodías,
armonías y encantadores ritmos, inspirados en la bella ciudad de Florencia. La partitura es alegre y vigorosa, un cúmulo de energía que ha servido de inspiración a Ángel Corella para realizar su primera creación coreográfica para el Corella Ballet.
Esta obra viene estructurada en cuatro movimientos. En el primero, el coreógrafo introduce al
espectador en Florencia, para hacerle partícipe de las excelencias de una ciudad enriquecida por su fascinante historia. El segundo movimiento muestra, a través del contraste entre el devenir de lo cotidiano, la hermosura y sensualidad que la reviste. En el Tercero, el visitante se siente rodeado por la vivaz e impetuosa alegría que contagian sus habitantes; aquél, completamente imbuido por esa vertiginosa euforia, parte de la ciudad con la sensación de haber saboreado su hechizo intemporal.
La pieza aúna la técnica depurada de los varones con la delicadeza y elegancia de las bailarinas,
conformando una obra llena de encanto y armonía, que se quedará en la memoria como un souvenir de la encantadora ciudad italiana.
Reparto(Sujeto a cambios):
Primer movimiento:
Parejas Principales:
Kazuko Omori; Yevgen Uzlenkov
Ashley Ellis; Yerlan Andagulov
Ashley Ellis; Yerlan Andagulov
Cuerpo de Baile:
Tracy Jones – Russel Ducker
Ana Calderón – Toby Mallitt
Carla López – Daniel Fajardo
Marta Ludevid – Ion Agirretxe
Alba Cazorla – Roberto Sánchez
Yoko Callegari – Iván Sánchez
Segundo Movimiento:
Pareja Principal:
Pareja Principal:
Carmen Corella; Iain Mackay
Cuerpo de Baile:
Russell Ducker, Toby Malliltt; Daniel Fajardo; Ion Agirretxe, Roberto Sánchez; Iván Sánchez
Tercer Movimiento
Principal: Ángel Corella
Cuerpo de baile:
Ana Calderón; Carla López, Tracy Jones, Marta Ludevid, Alba Cazorla, Yoko Callegari
Cuarto Movimiento
Pareja Principal: Adiarys Almeida – Fernando Bufalá
Final: Toda la compañía
“EPIMETHEUS” ESTRENO INTERNACIONAL
Coreografía: Russell Ducker
Música: Mike Oldfield
Diseño de Iluminación: Diego Acera Bofarull
Duración: 20 Minutos
Coreografía: Russell Ducker
Música: Mike Oldfield
Diseño de Iluminación: Diego Acera Bofarull
Duración: 20 Minutos
Trabajo neoclásico que ha tenido su fuente de inspiración en uno de los satélites de Saturno,
Epimetheus, y en la música de Mike Oldfiled.
En esta coreografía, los bailarines se mueven con la delicadeza y la energía que podría imaginarse de un cuerpo celeste y está conducido por la impresión de las órbitas y de la gravedad. Mike Oldfiel dimagina, en su partitura, cómo sonaría el movimiento de los planetas en un trabajo orquestalmente puro, pero que mantiene los rasgos distintivos de la creatividad de este compositor que se hizo famoso internacionalmente con su álbum “Tubular Bells”.
La coreografía es una interpretación física de esta composición musical que permite a los bailarines romper, con sus movimientos, los confines de la danza clásica, expresarse como individuos para converger en armonía como grupo. Junto a la música, los bailarines del Corella Ballet han sido también inspiradores, expandiendo el proceso creativo, desarrollando una diversidad física y ampliando las dimensiones de esta coreografía.
Russel Ducker es bailarín activo del Cuerpo de Baile del Corella Ballet. Como coreógrafo ha obtenido el Primer Puesto en los Premios Macmillan, De Valois y Ursula Morton. En el 2006, recibió el Pamela Self Award y NFL Choreographic Fundation. Ésta es su primera creación para el Corella Ballet.
Reparto (Sujeto a cambios):
Adiarys Almeida; Ashley Ellis; Joseph Gatti; Cristina Casa; Yevgen Uzlenkov
Cuerpo de Baile
Ana Calderón; Alexandra Basmagy; Ana Cabral; Marta Ludevid; Tracy Jones; Carla López;
Yerlan Andagulov; Iván Sánchez; Roberto Sánchez; Toby Mallitt
“FANCY FREE”
Coreografía: Jerome Robbins
Música: Leonard Bernstein (Por acuerdo con Boosey & Hawkes, Inc. y Monge y Boceta Asociados Musicales S.L.).
Canción Big Stuff compuesta por Dee Dee Bridgewater. Grabación dirigida por Glen Roven.
Escenografía: Oliver Smith
Vestuario: Kermit Love
Diseño Original de Iluminación: Ronald Bates
Reposición de la coreografía: Judith Fugate
Duración: 39 minutos
Representación autorizada por the Robbins Rights Trust.
Jerome Robbins creó Fancy Free durante una larga gira, costa a costa, con el American Ballet Theatre; durante este viaje, mantuvo una estrecha correspondencia con un joven compositor, por entonces aún desconocido, llamado Leonard Berstein. El estreno de este ballet en el Metropolitan de Nueva York, en abril de 1944, fue todo un acontecimiento, pues hizo emerger a jóvenes talentos del mundo de la danza, la coreografía, la música y la escenografía. Su éxito fue tal que, poco después, Fancy Free se convertiría en el musical “On the Town”, que más tarde popularizaría en el cine Gene Kelly.
El argumento de partida de la historia es simple: tres marineros recalan en Nueva York en un caluroso día de verano. Aprovechando un permiso, conocen a dos chicas y se inicia una competición entre ellos para ganarse su favor. La pugna en el bar sirve para que los bailarines pongan en juego y exhiban todo su talento, cada uno con variaciones específicas y tan espectaculares que han hecho de este ballet uno de los más aclamados de la obra de de Robbins.
Reparto (Sujeto a cambios):
Marineros: Herman Cornejo; Ángel Corella; Iain Mackay
Chicas: Adiarys Almeida; Ashley Ellis; Carmen Corella
Camarero: George Birkadze
27 jul 2009
Fallece Merce Cunningham
El célebre coreógrafo estadounidense Merce Cunningham, que revolucionó la danza contemporánea, ha muerto a la edad de 90 años, según ha informado la fundación que lleva su nombre.
"Estamos muy tristes por la muerte de Merce Cunningham, que falleció apaciblemente en su casa, por la noche, de forma natural", ha afirmado la institución en un comunicado.
La Fundación y la compañía de ballet han subrayado hasta que punto el coreógrafo "revolucionó las artes visuales y el entretenimiento, no por el capricho de ser un iconoclasta, sino por la belleza y la maravilla conseguidas a través de la exploración de nuevos caminos ".
"Estamos muy tristes por la muerte de Merce Cunningham, que falleció apaciblemente en su casa, por la noche, de forma natural", ha afirmado la institución en un comunicado.
La Fundación y la compañía de ballet han subrayado hasta que punto el coreógrafo "revolucionó las artes visuales y el entretenimiento, no por el capricho de ser un iconoclasta, sino por la belleza y la maravilla conseguidas a través de la exploración de nuevos caminos ".
Nacido el 16 de abril de 1919 Centralia, en el estado de Washington, en el noroeste de los Estados Unidos, el coreógrafo que liberó el baile de la música, el decorado y de la narración, era hijo de un abogado y se había formado en teatro y baile, del 1937 al 1939, en Cornish School a Seattle (actualmente, la Cornish College of the Arts).
Apodado el "Einstein" de la danza, Cunningham, tras haber bailado como solista en la compañía de Martha Graham, dinamitó los códigos del ballet desde los años 50: el bailarín ya no se mueve en función del centro de la escena, sino que él es el propio centro.
Apodado el "Einstein" de la danza, Cunningham, tras haber bailado como solista en la compañía de Martha Graham, dinamitó los códigos del ballet desde los años 50: el bailarín ya no se mueve en función del centro de la escena, sino que él es el propio centro.
Otra de sus aportaciones fue liberar completamente el baile de sus nexos con la música o del hilo narrativo. "No existe dominación de un arte sobre otro. Sus relaciones son completamente libres", decía sobre su técnica.
En su carrera se relacionó de forma profesional y personal con otros creadores que rompieron fronteras en el siglo XX. El más destacable de ellos fue el músico John Cage -que durante años también fue su compañero sentimental-. En sus colaboraciones componían música y coreografía por separado aunque al llevarlas a la escena se entrelazaban como si hubieran nacido juntas.
En 1953 Cunningham, nombrado leyenda por la Biblioteca del Congreso de EEUU, fundó la Merce Cunningham Dance Company en la mítica Black Mountain College, una institución de enseñanza libre que también funcionaba como una especie de comuna de artistas de todas las disciplinas en Carolina del Norte. Revolucionó las ideas básicas de la danza moderna, en la que aplicó tecnología como los programas informáticos de captura del movimiento y que ya emplean coreógrafos de todo el mundo.
Recientemente, su compañía estuvo en Madrid presentando su última coreografía 'Nearly Ninety' en los Teatros del Canal y en el Museo Reina Sofía exhibiendo uno de sus 'event', una pieza de arte efímera que el equipo de Por Alegría pudo disfrutar comprobando lo inovador y sorprendente que era este gran coreografo.
En junio de 2009 la agencia EFE informó desde Nueva York que La compañía de Merce Cunningham cerrará dos años después de que el nonagenario artista fallezca o bien no pueda dirigirla.
Cunningham, que cumplió 90 años el pasado abril, quiso que su compañía estuviera preparada para cuando su salud no le permitiera dirigirla, por lo que decidió que, cuando llegase ese momento, sus bailarines se embarcaran en una gira mundial de dos años tras la que el grupo debería disolverse.
Para ell presentó el "Plan de legado vivo", una hoja de ruta que la compañía y la fundación que llevan su nombre deberán seguir para cuidar su herencia artística y los derechos de autor que se desprenden de ella.
Según este plan, cuando Cunningham dejase de dirigir la compañía, se iniciará una gira mundial, en la que los bailarines recrearán la obra que ideó el artista, y que culminará con una actuación final en Nueva York, cuyas entradas, según ha estipulado el coreógrafo, no podrán costar más de 10 dólares.
Tras esa actuación, la compañía y su fundación cerrarán para transferir todos sus bienes a una sociedad, llamada Merce Cunningham Trust, que los custodiará y que permitirá, según dijeron los miembros de su fundación en un comunicado, que "el público de todo el mundo siga disfrutando de su legado".
"Intento enseñar a los estudiantes y a los bailarines mi técnica, pero de una manera que deja lugar al individualismo. Me gustaría que esa sociedad continuara haciéndolo, porque la danza es un proceso que nunca se detiene y que no debería detenerse si es para permanecer fresca y viva", dijo el coreógrafo.
Para el director ejecutivo de la Fundación Merce Cunningham, Trevor Carlson, el plan ideado por el coreógrafo "es exhaustivo, polifacético y, como el propio Merce, sienta un precedente".
"Ofrece un nuevo modelo a las compañías de danza y otras organizaciones artísticas que transitan a una existencia en la que su fundador ya no está presente", explicó Carlson, sobre un plan que también fija el proceso por el que se autorizarán licencias de las creaciones de Cunningham para ser representadas.
El proyecto contempla además la creación de un archivo digital con las coreografías creadas por el artista y asegura que los integrantes de la compañía recibirán un año de salario como compensación cuando sea disuelta.
La Fundación Cunningham anunció también una campaña para recaudar ocho millones de dólares, cifra que permitirá a la compañía, entre otras cosas, seguir trabajando en nuevos espectáculos hasta que se produzca la transición.
Descanse en paz.
Recientemente, su compañía estuvo en Madrid presentando su última coreografía 'Nearly Ninety' en los Teatros del Canal y en el Museo Reina Sofía exhibiendo uno de sus 'event', una pieza de arte efímera que el equipo de Por Alegría pudo disfrutar comprobando lo inovador y sorprendente que era este gran coreografo.
En junio de 2009 la agencia EFE informó desde Nueva York que La compañía de Merce Cunningham cerrará dos años después de que el nonagenario artista fallezca o bien no pueda dirigirla.
Cunningham, que cumplió 90 años el pasado abril, quiso que su compañía estuviera preparada para cuando su salud no le permitiera dirigirla, por lo que decidió que, cuando llegase ese momento, sus bailarines se embarcaran en una gira mundial de dos años tras la que el grupo debería disolverse.
Para ell presentó el "Plan de legado vivo", una hoja de ruta que la compañía y la fundación que llevan su nombre deberán seguir para cuidar su herencia artística y los derechos de autor que se desprenden de ella.
Según este plan, cuando Cunningham dejase de dirigir la compañía, se iniciará una gira mundial, en la que los bailarines recrearán la obra que ideó el artista, y que culminará con una actuación final en Nueva York, cuyas entradas, según ha estipulado el coreógrafo, no podrán costar más de 10 dólares.
Tras esa actuación, la compañía y su fundación cerrarán para transferir todos sus bienes a una sociedad, llamada Merce Cunningham Trust, que los custodiará y que permitirá, según dijeron los miembros de su fundación en un comunicado, que "el público de todo el mundo siga disfrutando de su legado".
"Intento enseñar a los estudiantes y a los bailarines mi técnica, pero de una manera que deja lugar al individualismo. Me gustaría que esa sociedad continuara haciéndolo, porque la danza es un proceso que nunca se detiene y que no debería detenerse si es para permanecer fresca y viva", dijo el coreógrafo.
Para el director ejecutivo de la Fundación Merce Cunningham, Trevor Carlson, el plan ideado por el coreógrafo "es exhaustivo, polifacético y, como el propio Merce, sienta un precedente".
"Ofrece un nuevo modelo a las compañías de danza y otras organizaciones artísticas que transitan a una existencia en la que su fundador ya no está presente", explicó Carlson, sobre un plan que también fija el proceso por el que se autorizarán licencias de las creaciones de Cunningham para ser representadas.
El proyecto contempla además la creación de un archivo digital con las coreografías creadas por el artista y asegura que los integrantes de la compañía recibirán un año de salario como compensación cuando sea disuelta.
La Fundación Cunningham anunció también una campaña para recaudar ocho millones de dólares, cifra que permitirá a la compañía, entre otras cosas, seguir trabajando en nuevos espectáculos hasta que se produzca la transición.
Descanse en paz.
Fotografía: AP
26 jul 2009
Entrevista a Ángel Corella en El Mundo
"Últimamente ya no me comparan ni con Nureyev ni con nadie; al contrario, empiezan a comparar a otros conmigo"
Fue el niño prodigio del ballet que, ignorado por las compañías españolas y, a punto de dejarlo todo, triunfó en París. Con 19 años sorprendió al mundo entero al convertirse en primer bailarín del American Ballet Theatre de Nueva York. Hoy, triunfa con su propia compañía y debuta como coreógrafo en el Festival Castell de Peralada (Girona) el próximo día 30.
Por ELENA PITA
Era entonces una sonrisa a una cara pegada. Pero han pasado 13 años desde aquella fría mañana de febrero en que lo encontré paseando su radiante rostro por las calles del Upper West Side de Manhattan. Era el niño prodigio que, después de ser rechazado por Víctor Ullate, en sólo un año había conquistado la Medalla de Oro de París y el puesto de primer bailarín en el American Ballet Theatre (ABT). Han pasado 13 años, digo, y el prodigio no se ha desvanecido: Ángel Corella (Colmenar Viejo, Madrid, 1975), además de convertirse en uno de los bailarines más aplaudidos del mundo (si no el más), con la ayuda de su tesón y un plan diagramadísimo, ha montado su propia compañía de ballet clásico, reconocida ya como una de las mejores del mundo. Ya no lleva la sonrisa pegada: hay que buscársela. La envidia y los reveses de la vida han hecho que sus proporciones de niño feliz, sobre todo feliz, se amolden a sus pómulos, a su barbilla. Hay que buscarla, y juro que la encontré, la sonrisa o la ilusión y una madurez apurada; la encontré en el rato que pasamos en su camerino del Liceu de Barcelona, y pese a las continuas interrupciones de su encargada de prensa, que nos mandaba callar con maneras de nurse aunque patria (menos mal que me había concedido la entrevista en exclusiva). El próximo día 30, Ángel Corella estrena su primera coreografía en el Festival de Peralada, Girona. Sexteto de cuerda sobre partitura de Chaikovski: una búsqueda de la modernidad en la pureza clásica.
P.¿Se queda definitivamente?
R.¿Dónde? No sé ni donde estoy.
P. Pues aquí, en este país.
R. Me quedo, sí, pero seguiré bailando mi temporada de primavera en el ABT: voy, bailo y vuelvo. Y también, como artista invitado de las compañías internacionales que me llaman; ahora vengo de San Petersburgo y me voy a Finlandia.
P. ¿No es agotador?
R. Sí, pero hay que mantener el nivel internacional, es bueno para la compañía: quiero que pronto empiece a tener entidad al margen de mí.
P. Cuando le conocí, con 20 años, recién llegado a Nueva York, se decía que seguía usted los pasos de Baryshnikov. ¿Qué siente ahora cuando le comparan con el gran Nureyev?
R. Últimamente ya no me comparan con nadie, al contrario, empiezan a comparar a otros conmigo. Es fantástico formar parte de una historia que se va repitiendo, y que me comparen con ellos como bailarín clásico, para mí, es un gran honor.
P. Fíjese, entonces me dijo: «Es muy difícil que un bailarín llegue a ser un buen director, porque tiene que olvidarse completamente de lo que ha sido, de ese deseo de pasar el baile por ti». ¿Lo logrará?
R. Huy, sí, creo que lo lograré: he bailado tantísimo y he dado tanto, que dirigir es otra forma de canalizar mi deseo y mi amor por la danza.
P. ¿Se desdice?
R. Sí, rectifico. Es difícil, pero creo que lo he conseguido.
P. ¿Qué cuenta en su ópera prima, Sexteto de cuerda, y por qué Chaikovski?
R. Desde que era niño, Chaikovski es uno de mis compositores favoritos, sobre todo por su melodía: es muy emotivo. Estaba buscando una música para un ballet clásico, pero innovador, tutús con manga larga y cuello de camisa, y de pronto cogí esta melodía y enseguida visualicé lo que cuenta: es como un souvenir de Florencia en su época dorada, siglo XIX. Terminé la coreografía en semana y media, un ballet de casi 40 minutos.
P. El repertorio de la compañía también incluye piezas contemporáneas y neoclásicas, y algunas fueron creadas para el ABT. ¿Tiene un acuerdo de cooperación con ellos?
R. No, es un intercambio sin acuerdo, me traigo algunas piezas porque me parecen lo mejor y en Europa no se han visto, y trato de que el repertorio sea lo más equilibrado posible. A la gente del clásico nos gusta también hacer contemporáneo, pero al contrario no sucede lo mismo: nos rechazan y nos atacan muchísimo, y yo creo que es para defenderse. Porque en el clásico es completamente imposible mentir: si saltas, saltas, y si te caes, lo haces estrepitosamente. En el contemporáneo en cambio, las cosas se difuminan, puedes tener errores y puede que no se noten, si te caes pero ruedas de determinada forma hasta puede quedar bonito y parecer parte de la coreografía.
P. Corella, ¿por qué creó una fundación con 26 años?, ¿una fundación no es cosa de personas muy mayores y consagradas?
R. Para que cuando el proyecto saliese adelante todo estuviera muy claro, que nadie pensase que lo hacía para enriquecerme, y que ante cualquier duda el protectorado de fundaciones supiera a dónde va destinado cada euro. Hasta ahora he perdido muchísimo dinero, mío personal: ya sólo cobro por mis actuaciones con compañías extranjeras.
P. Dice que lo suyo fue peor que lo de Billy Elliot. Cuéntenos cómo fue esa infancia de niño diferente.
R. Fue difícil, pero no eché nada de menos porque no conocí otra cosa. No tuve amigos, apenas los otros dos marginados de la escuela: la niña gruesa y el niño de rasgos orientales. Así que éramos tres: la gordita, el chino y el bailarín. Pasaba el tiempo con mis tres hermanas, que han sido mi soporte. Pero era tan feliz bailando que no me di cuenta de que aquella niñez no era normal; es decir, era un marginado pero muy, muy alegre.
P. O sea, que la sonrisa no fue nunca impostada.
R. Al contrario, era un chico extremadamente feliz, siempre con mis patines o en mi bicicleta, a 200 por hora por las calles de Colmenar, en busca de piezas para mis obras de carpintería, que era mi otra pasión.
P. ¿Cree que hoy sería peor?
R. Para nada, hoy sería muchísimo más fácil. Hay tantos grandes bailarines representando a España y tantos programas tipo Fama donde también los hombres bailan, que ya no se asocia necesariamente con una orientación homosexual sino que se entiende como una forma de expresión.
P. De cualquier modo, la segregación sexista pervive en las escuelas de modo totalmente anacrónico, ¿qué haría falta para erradicarla?
R. Yo creo que es algo que inculcan algunas familias, no el sistema educativo, pero se transmite en los colegios. Es una cuestión de educación social de adultos. Sin embargo, ya no ocurre lo que a mí me pasó, que un par de profesoras me aconsejaron dedicarme a una profesión más viril. No, los profesores hoy están más formados.
P. ¿Qué cara le ponen, por ejemplo, los niños cuando le escuchan hablar de ballet en los talleres que ha impartido en escuelas?
R. Pues al principio siempre se da la típica risita boba, cuando nos ven actuar en mallas y con suspensor; y, cuando viene el turno de las preguntas, suelen soltar la primera gracieta que se les ocurre. Pero si cortas a tiempo esa estupidez, a partir de ahí sus preguntas son siempre mucho más inteligentes de lo que yo podría esperar. El segundo año que fuimos, la reacción ha sido completamente distinta: hubo mucho más respeto y predisposición a aprender algo nuevo.
P. Corella, y ¿qué cara ponía su padre cuando veía bailar con tutú a su único hijo varón?
R. Me apoyó en todo momento; él sabía que lo iba a pasar mal, pero me dijo que si eso era lo que deseaba, adelante. Mis padres son personas muy especiales, muy evolucionadas espiritualmente, y haber nacido en el seno de esta familia me ha facilitado muchísimo las cosas. A él, le sigue gustando el fútbol, pero ahora es un apasionado de la danza. Los dos vienen siempre a verme, y él es el primero que se emociona.
P. ¿No les dolía su condición de chico marginado?
R. Si me hubieran visto deprimido, claro que se hubieran preocupado, pero como yo estaba siempre tan feliz en casa... Se preocupaban mucho más por lo descontento que estaba dentro del mundo de la danza que por mi marginalidad en el colegio.
P. La danza-escuela que proyecta, ¿es un modo de proteger a los bailarines del bulling y la marginación?
R. Por supuesto, el vivir en un entorno donde lo tienes todo integrado, colegio, residencia, escuela de baile, comedor, y donde todos se dedican a lo mismo, te hace sentirte protegido y acompañado por gente que se preocupa por ti, desde tutores hasta nutricionistas. Queremos que sea una de las mejores escuelas internacionales de danza clásica del mundo, y para eso he estado visitando y trabajando en las más reconocidas: la del Royal Ballet de Londres, la escuela americana, la australiana, la japonesa, y he extraído e incluido en el proyecto lo mejor de cada una.
P. ¿Cuándo empezará a funcionar?
R. Cuando tengamos la sede totalmente terminada. De momento, la obra está parada por la crisis. El anterior alcalde de La Granja (Segovia) nos ha brindado el Palacio de Santa Cecilia, un lugar maravilloso al que quería darle un fin cultural.
P. Y esta escuela, ¿ no es, en cierto modo, su particular ajuste de cuentas con los malos tratos que recibió de niño, de compañeros y maestros?
R. No, ni tampoco quiero demostrar nada, sino hacer realidad un sueño. Entiendo que para una institución pública puede ser complicado poner las bases de una compañía, pero si los primeros pasos se dan en el ámbito privado, las cosas se agilizan y la ayuda oficial siempre llegará a tiempo.
P. Corella, ¿por qué cree que Víctor Ullate no le valoró como debiera?, ¿tal vez por su excesivo temperamento, o su inconmensurable ego?
R. Eso habría que preguntárselo a Víctor, yo creo. ¿Se conoce a algún bailarín dentro de su compañía?
P. Usted, Tamara Rojo y unos cuantos más.
R. No, no, pero dentro del ballet. Él no quiere una estrella dentro de su compañía, sólo brillan cuando se van. Y ahí es donde yo quiero hacer las cosas diferentes, no quiero ser como Ullate ni como Duato: mi compañía se llama, de momento, Corella Ballet y espero retirarle pronto el Corella, pero lo importante son los bailarines y no el director. Porque, mañana, el público no vendrá a verme a mí, que estaré retirado o quién sabe, sino a cualquiera de ellos, maravillosos todos.
P. ¿Qué recuerdos tiene de Ullate, qué siente hoy hacia él?
R. Temor, siempre le hemos tenido temor, todos los bailarines. Inculcaba el respeto a través del temor, y yo no creo que esto sea necesario. Yo salgo a cenar con mis bailarines y cuando entro en el ensayo, se estiran y me respetan como a su director, por lo que hago.
P. Lo cierto es que estuvo a punto de dejarlo, por algo tan prosaico como el bricolaje, ¿no es cierto? ¿Su madre fue la culpable de su persistencia?
R. Sí, mi madre y unos amigos que, como ella, trabajaban para UNICEF, y que me aconsejaron que, antes de dejarlo, me presentara a una competición de danza. Y así participé y gané el Gran Premio y la Medalla de Oro del Concurso Internacional de Ballet de París, en 1994.
P. Bueno, y al parecer todo hunde sus raíces en el Centro Gallego de la Habana y en un abuelo escritor, Agustín López Nieto. ¿Llegó a conocerlo?
R. Sí, pero ya le había dado un ataque cerebral y no reconocía. Había sido una persona muy inteligente y muy melómana, mi abuela fue quien me transmitió su espíritu. Después de mi madre, ella ha sido la persona más influyente en mi vida.
P. Aquella infancia, su pasado, ¿no está en la esencia de su forma de ser valiente, arriesgada, sobre todo emprendedora?
R. Creo que sí. Los seres humanos, de todos modos, somos sorprendentes. Y a lo largo de todos estos años en el mundo de la danza he aprendido algo inimaginable para mí: que hay gente con muchísima malicia, y que, encima, son inconscientes de ello y no pueden cambiar.
P.¿A veces piensa en su carrera como una especie de prodigio?
R. Yo creo que estaba en cierto modo predestinado. Y cuando la gente me pregunta cómo todo esto que he hecho no se me sube a la cabeza, mi respuesta es que siento las cosas que me han sucedido como algo natural, algo que debía suceder porque estaba escrito, predeterminado, así que a mí no me ha sorprendido.
P. Corella, ¿se siente blanco de muchas envidias, en el mundo de divas y divos que le rodea?
R. Por desgracia, sí. Pero no yo, sino el proyecto. La gente del gremio me decía con la boca muy grande que esto no iba a suceder, parecían saber más que yo; y han intentado echarlo por tierra con críticas malas y ciegas cuando el público aplaudía a rabiar. Pero yo creo que si hay envidia es porque la compañía es buena y les pica: son ataques tan obvios...
P. Dígame, ¿por qué la danza necesita y reclama siempre apoyo de los dineros públicos?, ¿acaso no puede darse una compañía independiente, como ocurre en el teatro, en el cine, en la editorial?
R. No, porque la Ley de Mecenazgo en este país lo hace imposible: la gente que nos apoya, como Tous, sencillamente nos regala el dinero. Y esto es así porque se entiende que la danza clásica es un capricho, y no una necesidad como lo es, para cubrir un hueco que llevaba vacío 22 años.
P. Sueña con hacer de La Granja el Salzburgo de la danza. ¿Qué más sueña para su vida?
R. Que la compañía adquiera solidez socioeconómica, porque artísticamente ya la tiene. Y que la cultura política nos tenga en cuenta como una compañía primordial para el país, porque tiene ya una calidad y es reconocida internacionalmente entre las mejores: que no la dejen morir.
Fuente: elmundo.es
Fue el niño prodigio del ballet que, ignorado por las compañías españolas y, a punto de dejarlo todo, triunfó en París. Con 19 años sorprendió al mundo entero al convertirse en primer bailarín del American Ballet Theatre de Nueva York. Hoy, triunfa con su propia compañía y debuta como coreógrafo en el Festival Castell de Peralada (Girona) el próximo día 30.
Por ELENA PITA
Era entonces una sonrisa a una cara pegada. Pero han pasado 13 años desde aquella fría mañana de febrero en que lo encontré paseando su radiante rostro por las calles del Upper West Side de Manhattan. Era el niño prodigio que, después de ser rechazado por Víctor Ullate, en sólo un año había conquistado la Medalla de Oro de París y el puesto de primer bailarín en el American Ballet Theatre (ABT). Han pasado 13 años, digo, y el prodigio no se ha desvanecido: Ángel Corella (Colmenar Viejo, Madrid, 1975), además de convertirse en uno de los bailarines más aplaudidos del mundo (si no el más), con la ayuda de su tesón y un plan diagramadísimo, ha montado su propia compañía de ballet clásico, reconocida ya como una de las mejores del mundo. Ya no lleva la sonrisa pegada: hay que buscársela. La envidia y los reveses de la vida han hecho que sus proporciones de niño feliz, sobre todo feliz, se amolden a sus pómulos, a su barbilla. Hay que buscarla, y juro que la encontré, la sonrisa o la ilusión y una madurez apurada; la encontré en el rato que pasamos en su camerino del Liceu de Barcelona, y pese a las continuas interrupciones de su encargada de prensa, que nos mandaba callar con maneras de nurse aunque patria (menos mal que me había concedido la entrevista en exclusiva). El próximo día 30, Ángel Corella estrena su primera coreografía en el Festival de Peralada, Girona. Sexteto de cuerda sobre partitura de Chaikovski: una búsqueda de la modernidad en la pureza clásica.
P.¿Se queda definitivamente?
R.¿Dónde? No sé ni donde estoy.
P. Pues aquí, en este país.
R. Me quedo, sí, pero seguiré bailando mi temporada de primavera en el ABT: voy, bailo y vuelvo. Y también, como artista invitado de las compañías internacionales que me llaman; ahora vengo de San Petersburgo y me voy a Finlandia.
P. ¿No es agotador?
R. Sí, pero hay que mantener el nivel internacional, es bueno para la compañía: quiero que pronto empiece a tener entidad al margen de mí.
P. Cuando le conocí, con 20 años, recién llegado a Nueva York, se decía que seguía usted los pasos de Baryshnikov. ¿Qué siente ahora cuando le comparan con el gran Nureyev?
R. Últimamente ya no me comparan con nadie, al contrario, empiezan a comparar a otros conmigo. Es fantástico formar parte de una historia que se va repitiendo, y que me comparen con ellos como bailarín clásico, para mí, es un gran honor.
P. Fíjese, entonces me dijo: «Es muy difícil que un bailarín llegue a ser un buen director, porque tiene que olvidarse completamente de lo que ha sido, de ese deseo de pasar el baile por ti». ¿Lo logrará?
R. Huy, sí, creo que lo lograré: he bailado tantísimo y he dado tanto, que dirigir es otra forma de canalizar mi deseo y mi amor por la danza.
P. ¿Se desdice?
R. Sí, rectifico. Es difícil, pero creo que lo he conseguido.
P. ¿Qué cuenta en su ópera prima, Sexteto de cuerda, y por qué Chaikovski?
R. Desde que era niño, Chaikovski es uno de mis compositores favoritos, sobre todo por su melodía: es muy emotivo. Estaba buscando una música para un ballet clásico, pero innovador, tutús con manga larga y cuello de camisa, y de pronto cogí esta melodía y enseguida visualicé lo que cuenta: es como un souvenir de Florencia en su época dorada, siglo XIX. Terminé la coreografía en semana y media, un ballet de casi 40 minutos.
P. El repertorio de la compañía también incluye piezas contemporáneas y neoclásicas, y algunas fueron creadas para el ABT. ¿Tiene un acuerdo de cooperación con ellos?
R. No, es un intercambio sin acuerdo, me traigo algunas piezas porque me parecen lo mejor y en Europa no se han visto, y trato de que el repertorio sea lo más equilibrado posible. A la gente del clásico nos gusta también hacer contemporáneo, pero al contrario no sucede lo mismo: nos rechazan y nos atacan muchísimo, y yo creo que es para defenderse. Porque en el clásico es completamente imposible mentir: si saltas, saltas, y si te caes, lo haces estrepitosamente. En el contemporáneo en cambio, las cosas se difuminan, puedes tener errores y puede que no se noten, si te caes pero ruedas de determinada forma hasta puede quedar bonito y parecer parte de la coreografía.
P. Corella, ¿por qué creó una fundación con 26 años?, ¿una fundación no es cosa de personas muy mayores y consagradas?
R. Para que cuando el proyecto saliese adelante todo estuviera muy claro, que nadie pensase que lo hacía para enriquecerme, y que ante cualquier duda el protectorado de fundaciones supiera a dónde va destinado cada euro. Hasta ahora he perdido muchísimo dinero, mío personal: ya sólo cobro por mis actuaciones con compañías extranjeras.
P. Dice que lo suyo fue peor que lo de Billy Elliot. Cuéntenos cómo fue esa infancia de niño diferente.
R. Fue difícil, pero no eché nada de menos porque no conocí otra cosa. No tuve amigos, apenas los otros dos marginados de la escuela: la niña gruesa y el niño de rasgos orientales. Así que éramos tres: la gordita, el chino y el bailarín. Pasaba el tiempo con mis tres hermanas, que han sido mi soporte. Pero era tan feliz bailando que no me di cuenta de que aquella niñez no era normal; es decir, era un marginado pero muy, muy alegre.
P. O sea, que la sonrisa no fue nunca impostada.
R. Al contrario, era un chico extremadamente feliz, siempre con mis patines o en mi bicicleta, a 200 por hora por las calles de Colmenar, en busca de piezas para mis obras de carpintería, que era mi otra pasión.
P. ¿Cree que hoy sería peor?
R. Para nada, hoy sería muchísimo más fácil. Hay tantos grandes bailarines representando a España y tantos programas tipo Fama donde también los hombres bailan, que ya no se asocia necesariamente con una orientación homosexual sino que se entiende como una forma de expresión.
P. De cualquier modo, la segregación sexista pervive en las escuelas de modo totalmente anacrónico, ¿qué haría falta para erradicarla?
R. Yo creo que es algo que inculcan algunas familias, no el sistema educativo, pero se transmite en los colegios. Es una cuestión de educación social de adultos. Sin embargo, ya no ocurre lo que a mí me pasó, que un par de profesoras me aconsejaron dedicarme a una profesión más viril. No, los profesores hoy están más formados.
P. ¿Qué cara le ponen, por ejemplo, los niños cuando le escuchan hablar de ballet en los talleres que ha impartido en escuelas?
R. Pues al principio siempre se da la típica risita boba, cuando nos ven actuar en mallas y con suspensor; y, cuando viene el turno de las preguntas, suelen soltar la primera gracieta que se les ocurre. Pero si cortas a tiempo esa estupidez, a partir de ahí sus preguntas son siempre mucho más inteligentes de lo que yo podría esperar. El segundo año que fuimos, la reacción ha sido completamente distinta: hubo mucho más respeto y predisposición a aprender algo nuevo.
P. Corella, y ¿qué cara ponía su padre cuando veía bailar con tutú a su único hijo varón?
R. Me apoyó en todo momento; él sabía que lo iba a pasar mal, pero me dijo que si eso era lo que deseaba, adelante. Mis padres son personas muy especiales, muy evolucionadas espiritualmente, y haber nacido en el seno de esta familia me ha facilitado muchísimo las cosas. A él, le sigue gustando el fútbol, pero ahora es un apasionado de la danza. Los dos vienen siempre a verme, y él es el primero que se emociona.
P. ¿No les dolía su condición de chico marginado?
R. Si me hubieran visto deprimido, claro que se hubieran preocupado, pero como yo estaba siempre tan feliz en casa... Se preocupaban mucho más por lo descontento que estaba dentro del mundo de la danza que por mi marginalidad en el colegio.
P. La danza-escuela que proyecta, ¿es un modo de proteger a los bailarines del bulling y la marginación?
R. Por supuesto, el vivir en un entorno donde lo tienes todo integrado, colegio, residencia, escuela de baile, comedor, y donde todos se dedican a lo mismo, te hace sentirte protegido y acompañado por gente que se preocupa por ti, desde tutores hasta nutricionistas. Queremos que sea una de las mejores escuelas internacionales de danza clásica del mundo, y para eso he estado visitando y trabajando en las más reconocidas: la del Royal Ballet de Londres, la escuela americana, la australiana, la japonesa, y he extraído e incluido en el proyecto lo mejor de cada una.
P. ¿Cuándo empezará a funcionar?
R. Cuando tengamos la sede totalmente terminada. De momento, la obra está parada por la crisis. El anterior alcalde de La Granja (Segovia) nos ha brindado el Palacio de Santa Cecilia, un lugar maravilloso al que quería darle un fin cultural.
P. Y esta escuela, ¿ no es, en cierto modo, su particular ajuste de cuentas con los malos tratos que recibió de niño, de compañeros y maestros?
R. No, ni tampoco quiero demostrar nada, sino hacer realidad un sueño. Entiendo que para una institución pública puede ser complicado poner las bases de una compañía, pero si los primeros pasos se dan en el ámbito privado, las cosas se agilizan y la ayuda oficial siempre llegará a tiempo.
P. Corella, ¿por qué cree que Víctor Ullate no le valoró como debiera?, ¿tal vez por su excesivo temperamento, o su inconmensurable ego?
R. Eso habría que preguntárselo a Víctor, yo creo. ¿Se conoce a algún bailarín dentro de su compañía?
P. Usted, Tamara Rojo y unos cuantos más.
R. No, no, pero dentro del ballet. Él no quiere una estrella dentro de su compañía, sólo brillan cuando se van. Y ahí es donde yo quiero hacer las cosas diferentes, no quiero ser como Ullate ni como Duato: mi compañía se llama, de momento, Corella Ballet y espero retirarle pronto el Corella, pero lo importante son los bailarines y no el director. Porque, mañana, el público no vendrá a verme a mí, que estaré retirado o quién sabe, sino a cualquiera de ellos, maravillosos todos.
P. ¿Qué recuerdos tiene de Ullate, qué siente hoy hacia él?
R. Temor, siempre le hemos tenido temor, todos los bailarines. Inculcaba el respeto a través del temor, y yo no creo que esto sea necesario. Yo salgo a cenar con mis bailarines y cuando entro en el ensayo, se estiran y me respetan como a su director, por lo que hago.
P. Lo cierto es que estuvo a punto de dejarlo, por algo tan prosaico como el bricolaje, ¿no es cierto? ¿Su madre fue la culpable de su persistencia?
R. Sí, mi madre y unos amigos que, como ella, trabajaban para UNICEF, y que me aconsejaron que, antes de dejarlo, me presentara a una competición de danza. Y así participé y gané el Gran Premio y la Medalla de Oro del Concurso Internacional de Ballet de París, en 1994.
P. Bueno, y al parecer todo hunde sus raíces en el Centro Gallego de la Habana y en un abuelo escritor, Agustín López Nieto. ¿Llegó a conocerlo?
R. Sí, pero ya le había dado un ataque cerebral y no reconocía. Había sido una persona muy inteligente y muy melómana, mi abuela fue quien me transmitió su espíritu. Después de mi madre, ella ha sido la persona más influyente en mi vida.
P. Aquella infancia, su pasado, ¿no está en la esencia de su forma de ser valiente, arriesgada, sobre todo emprendedora?
R. Creo que sí. Los seres humanos, de todos modos, somos sorprendentes. Y a lo largo de todos estos años en el mundo de la danza he aprendido algo inimaginable para mí: que hay gente con muchísima malicia, y que, encima, son inconscientes de ello y no pueden cambiar.
P.¿A veces piensa en su carrera como una especie de prodigio?
R. Yo creo que estaba en cierto modo predestinado. Y cuando la gente me pregunta cómo todo esto que he hecho no se me sube a la cabeza, mi respuesta es que siento las cosas que me han sucedido como algo natural, algo que debía suceder porque estaba escrito, predeterminado, así que a mí no me ha sorprendido.
P. Corella, ¿se siente blanco de muchas envidias, en el mundo de divas y divos que le rodea?
R. Por desgracia, sí. Pero no yo, sino el proyecto. La gente del gremio me decía con la boca muy grande que esto no iba a suceder, parecían saber más que yo; y han intentado echarlo por tierra con críticas malas y ciegas cuando el público aplaudía a rabiar. Pero yo creo que si hay envidia es porque la compañía es buena y les pica: son ataques tan obvios...
P. Dígame, ¿por qué la danza necesita y reclama siempre apoyo de los dineros públicos?, ¿acaso no puede darse una compañía independiente, como ocurre en el teatro, en el cine, en la editorial?
R. No, porque la Ley de Mecenazgo en este país lo hace imposible: la gente que nos apoya, como Tous, sencillamente nos regala el dinero. Y esto es así porque se entiende que la danza clásica es un capricho, y no una necesidad como lo es, para cubrir un hueco que llevaba vacío 22 años.
P. Sueña con hacer de La Granja el Salzburgo de la danza. ¿Qué más sueña para su vida?
R. Que la compañía adquiera solidez socioeconómica, porque artísticamente ya la tiene. Y que la cultura política nos tenga en cuenta como una compañía primordial para el país, porque tiene ya una calidad y es reconocida internacionalmente entre las mejores: que no la dejen morir.
Fuente: elmundo.es
22 jul 2009
El Corella Ballet en el Teatro Romano de Mérida
El Corella Ballet actuará en el Teatro Romano de Mérida los días 23, 24 y 25 de Julio a las 23h. Ofrecen un programa formado por cuatro obras: 'Clear', 'Romeo y Julieta', 'Diana y Acteón', y 'Bruch violin concerto nº 1'.
El director del Festival de Mérida, Francisco Suárez, destacó en la rueda de prensa celebrada en Mérida que el Festival "se engrandece" con la presencia de Angel Corella y su Compañía la cual ya actuó en la capital extremeña en 2001.
Angel Corella habló de cada una de las coreografías que representarán. Se abrirá con 'Clear', una obra creada para la compañía 'American Ballet' y diseñada por el coreógrafo Stanton Welch.
La inspiración para la creación de Clear surgió tras el dramático atentado del 11/S. Ha sido una obra ampliamente alabada por la crítica debido a la danza explosiva y la fiereza exhibida por los bailarines masculinos, desprendiendo una energía inagotable impulsada por la presencia de una única bailarina en el reparto. Tras una exhuberancia, casi agresiva, se entrevé una tristeza que sólo el reconfortante abrazo de amor del final es capaz de disipar.
A continuación, señaló, tendrá lugar la "obra clave" del espectáculo, 'Diana y Acteón', una coreografía de Agrippina Vagánova. Esta pieza cuenta cómo Acteón, en un día de caza con sus amigos entra en el bosque de Diana y la descubre en su cueva bañándose desnuda. Ella muy enfadada le echa agua en los ojos y le convierte en ciervo. Cuando él sale de la cueva para decírselo a sus amigos, éstos lo confunden con los ciervos y lo matan.
La siguiente coreografíaserá el paso a dos de 'Romeo y Julieta' de Shakespeare, una obra elegida porque "el entorno es ideal" para su puesta en escena, indicó Corella. Se trata de una coreografía del propio director de la compañía y con la música de Sergéi Prokófiev, y será interpretado por los bailarines Carmen Corella y Iain Mackay los tres días.
Por último, el espectáculo terminará con 'Bruch violin concerto nº1', una obra creada para también para el 'American Ballet' por el coreógrafo Clark Tippet. Al respecto, señaló que es la representación "más clásica de todas", por lo que supondrá "un despliegue de la danza clásica en su pura esencia". Además, añadió que los pasos a dos de esta "son todos de una plasticidad maravillosa y de una frescura" que permitirá a los espectadores salir del Teatro Romano con un "muy buen sabor de boca".
Angel Corella destacó que para la compañía es "un honor y un privilegio" actuar en el Teatro Romano, ya que el Festival de Mérida es "sinónimo de belleza" y de espectáculos "con muchísima calidad" e "importancia".
El elenco de Clear será:
Pareja Principal:
Kazuko Omori, Herman Cornejo (23,25)
Ashley Ellis, Yevgen Uzlenkov (24)
Dúo:
Iván Sánchez, Roberto Sánchez (23, 25)
Yerlan Andagulov, Sergei D'Yachkov (24)
Trío:
Josehp Gatti, Kirill Radev, Fernando Bufalá (23)
Kirill Radev, George Birkadze, Valerio Lunadei (24)
Fernando Bufalá, Yevgen Uzlenkov, Toby Mallitt (25)
Extra:
Russell Ducker (23, 25)
Ion Agirretxe (24)
Los bailarines de Diana y Acteón:
Adiarys Almeida, Ángel Corella (23)
Kazuko Omori, Ángel Corella (24,25)
El elenco de 'Bruch violin concerto nº1':
Pareja AZUL:
Mª José Sales, Sergei D'Yachkov (23,25)
Pareja ROJO:
Ana Calderón, Yerlan Andagulov (23)
Cristina Casa, Fernando Bufalá (24)
Cristina Casa, Yerlan Andagulov (25)
Pareja AQUA:
Ashley Ellis, Luca Giaccio (23,25)
Alba Cazorla, Sergei D’Yachkov (24)
Pareja ROSA:
Cristina Casa, Yevgen Uzlenkov (23)
Kazuko Omori, Kirill Radev (24)
Carla López, Kirill Radev (25)
TEATRO ROMANO DE MÉRIDA
23, 24 y 25 de Julio de 2009 a las 23:00h.
VENTA DE ENTRADAS: entradas.com
Por teléfono en el 902 222 484
DESCUENTOS:
Jubilados 20%
Discapacitados 20%
Jóvenes de 7 a 18 años 15%
Estudiantes de 18 a 25 años 15%
Grupos desde 25 personas 10%
Tarjeta mecenas 20%
Descuento a desempleados
Ofertas no acumulables. Descuentos aplicables en taquilla y teléfono del Festival. Imprescindible presentación de documento acreditativo.
21 jul 2009
Entrevista a Tamara Rojo por Ángeles López
Tamara Rojo: «Queda la duda sobre si Giselle es tonta o se hace la tonta»
Ángeles López
Es la gran estrella del ballet español. Galardonada con el Premio Príncipe de Asturias y el Venios –considerado el Oscar de la danza–, lleva una década siendo la primera figura del Royal Ballet de Londres. Entre La Habana y Tokio (donde estará los primeros trece días de agosto), araña para nosotros unos segundos de su escasísimo tiempo.
-¿Modifica su actitud sobre el escenario, dependiendo del lugar y el público?
-Mi actitud no cambia, pero el ambiente en el teatro es muy diferente según el público. No son sólo los aplausos, sino también los silencios, los murmullos.
-Y ahora, La Habana. ¿Es reconfortante encontrarse con un público tan exigente como el cubano?
-Sí, pero al tiempo supone un plus de exigencia. El Ballet Nacional de Cuba ha realizado una gran labor en extender el conocimiento de la danza al pueblo cubano. La expectación generada en la isla por la llegada del Royal Ballet es impresionante.
-Me han dicho que cuando piensa en su casa, se acuerda de Londres... Siento que la estamos perdiendo, que diría Aute...
-(Risas) De momento, estoy bien en Bloomsbury. En un apartamento con un minúsculo jardín que no cuido lo suficiente por falta de tiempo. Me queda cerca del Covent Garden y puedo ir andando al Opera House. El barrio tiene buen ambiente, está lleno de librerías, cafés y restaurantes con carácter.
-«Soy quien quiero ser: una puta o una enamorada», me decía en la última entrevista...
-Como bailarina, tengo un millón de vidas: me muero veinte veces y vuelvo a renacer. Es la mejor psicoterapia, desde luego, e influye en mi forma de ver la vida. Ponerse en otra piel relaja el alma.
-Empezó a bailar por el olor. ¿Es así?
-Lola Grande, ¡qué bien olía! Una tarde me colé en su clase de ballet. Se impartía en un gimnasio y hacía mucho frío, pero el olor de Lola abrigaba y, además, era el único sitio del colegio donde no había ni gritos.
-Dicen que una persona que mantiene los amigos de su infancia es alguien de fiar, ¿tiene al día su agenda escolar?
-Pues algunos sí y otros se han ido diluyendo por culpa de la distancia.
-Y a mí que me da la sensación de que está en permanente pelea con el aire.
-Es una relación desigual entre la mente y el resto del cuerpo. Sabemos de nuestras limitaciones físicas pero el sistema límbico es exigente y pide más.
-Dígame, para volar, ¿qué es lo mejor?
-Tener un buen partenaire es lo que más ayuda.
-Observo tres constantes en su vida: sacrificio, suerte y generosidad.
-Te falta la sed de conocer y el perfeccionismo.
-Quería ser el Quijote de la danza y volver a España con el caballo y pelear. ¿Quién sería su Sancho?
-La danza en España no necesita Quijotes sino profesionalismo. Cuando sea considerada como el Arte con mayúsculas que es, sin paternalismos ni falsos mesianismos, que muchas veces encubren muchas vergüenzas, probablemente logre el estatus que merece. En cuanto a Sancho, en España hay unos cuantos, también en la danza.
-Con perdón... ¿Cuánto tiempo debe estar una bailarina sobre los escenarios?
-Sin perdón alguno: el que pueda, el que quiera ella y, sobre todo, el público.
-Salió de España con una mano delante y otra detrás y llegó a ser portada del «Times». ¿Me da el teléfono de su «coach»?
-Sin querer relegar las ayudas y consejos de personas a las que admiro como Ricardo Cue y Boris Trailine, no me gustaría dar a entender que la carrera profesional de una bailarina de danza clásica depende del «coach» o de un manager.
-Si ya de pequeña apuntaba maneras de determinación... ¿No es cierto que se sabía Viridiana de Memoria?
-(Risas) Mi padre es un fan de Buñuel y creo que de crío estuvo en alguna toma de Viridiana. En casa sólo se veía «La Clave» y películas de Buñuel, Fellini, Godard...
-¡Qué duro!: ¿una infancia sin E.T?
-Yo nunca vi E.T.
-¿Tampoco pelis de Disney?
-De niña uno de mis personajes favoritos era Blancanieves porque era morena. Era la única película de Disney en que la protagonista tenía el pelo negro, como yo. Me molestaba que todas la heroínas fueran rubias y todas las malas tuvieran el pelo oscuro. ¡Incluso la barbie era rubia! Por eso jamás tuve una muñeca de esas.
-¿Se sigue sintiendo de Chamberí?
-¡Y devota de las fiestas de San Isidro! Aunque... se es también de donde se pace y es de buen nacido ser agradecido, ¿no?
-Me ha dicho un pajarito, que suele decir lo que no debe... ¿la mayor metedura de pata fue...?
-No es tanto que meta la pata, es que no me gusta morderme la lengua cuando veo cosas que no me parecen bien y eso, en nuestro país, sobre todo a los que mandan, no les hace mucha gracia.
-Cuando le dieron el Príncipe de Asturias, ¿qué le dijo Don Felipe?
-«A ver si podemos hacer algo por la danza».
-¿Y...?
-Lo que se ha hecho desde entonces puedes comprobarlo fácilmente.
-Siempre he querido preguntárselo: Giselle, ¿es inocente o boba de remate?
-Es una adolescente del siglo XIX descrita por un poeta romántico francés. A la pobre Giselle nadie le dice que los nobles son unos aprovechados acostumbrados al derecho de pernada. De todas formas, siempre queda la duda sobre si es tonta o se hace la tonta.
-¿Le ha tocado soportar a muchos pagafantas... o a las bailarinas las dejan en paz?
-No domino ese término pero si es lo que me figuro, me ha tocado alguno pero sin graves consecuencias.
-Le fascinan los zapatos, confiese: ¿tiene unos «manolos»?
-Todavía no, pero ganas sobran. A pesar de que los pies de las bailarinas son un drama, tengo unos Jimmy Choo.
-¿Cómo ve la política del Gobierno desde Londres?
-Con la debida distancia.
-¿También le llegan las desavenencias de la oposición?
-Leo los periódicos españoles los fines de semana, pero no sigo el politiqueo partidista, es muy aburrido.
-Los expertos dicen que nunca hemos tenido una clase política tan mediocre.
-Los expertos a lo peor también pertenecen a la misma casta, nunca se sabe.
-Volviendo a la danza, ¿a Nacho Duato habría que darle un tirón de orejas?
-Duato es un gran artista que merece toda mi consideración. Sin embargo, no estoy de acuerdo con algunas de sus decisiones y estrategias. Él representa un estilo estimable pero la danza, la actual y la clásica, es mucho más amplia.
-¿Le cabe la maternidad en sus planes?
-Como puedes imaginar, no de momento.
-Y la librería en la costa... ¿también la pospone?
-He tenido que rendirme a la evidencia, otra vez será.
-¿No me diga que tampoco ha logrado conocer a Benicio del Toro?
-Ni a él ni a Joaquin Phoenix. No consigo que me los presenten. ¿Podrías hacer algo? (Risas).
Un salto contra la ley de la gravedad
Imposible encontrar a Tamara con las piernas de la lógica, mal cruzadas. Ni mal vestida su opinión; ni despeinado su talante... Cincelada su cabeza -a la par que sus miembros- a golpe de diapasón, es, exactamente, lo que quiere ser en cada momento. Y ninguna otra cosa distinta. Con una vida entregada a los aviones, los escenarios y a vencer la ley de la gravedad no pierde ni un segundo la gracia y la perfección. Desde luego, viéndola volar sobre las tablas, a uno le acechan todas sus incómodas tosquedades...
Fuente: larazon.es
Ángeles López
Es la gran estrella del ballet español. Galardonada con el Premio Príncipe de Asturias y el Venios –considerado el Oscar de la danza–, lleva una década siendo la primera figura del Royal Ballet de Londres. Entre La Habana y Tokio (donde estará los primeros trece días de agosto), araña para nosotros unos segundos de su escasísimo tiempo.
-¿Modifica su actitud sobre el escenario, dependiendo del lugar y el público?
-Mi actitud no cambia, pero el ambiente en el teatro es muy diferente según el público. No son sólo los aplausos, sino también los silencios, los murmullos.
-Y ahora, La Habana. ¿Es reconfortante encontrarse con un público tan exigente como el cubano?
-Sí, pero al tiempo supone un plus de exigencia. El Ballet Nacional de Cuba ha realizado una gran labor en extender el conocimiento de la danza al pueblo cubano. La expectación generada en la isla por la llegada del Royal Ballet es impresionante.
-Me han dicho que cuando piensa en su casa, se acuerda de Londres... Siento que la estamos perdiendo, que diría Aute...
-(Risas) De momento, estoy bien en Bloomsbury. En un apartamento con un minúsculo jardín que no cuido lo suficiente por falta de tiempo. Me queda cerca del Covent Garden y puedo ir andando al Opera House. El barrio tiene buen ambiente, está lleno de librerías, cafés y restaurantes con carácter.
-«Soy quien quiero ser: una puta o una enamorada», me decía en la última entrevista...
-Como bailarina, tengo un millón de vidas: me muero veinte veces y vuelvo a renacer. Es la mejor psicoterapia, desde luego, e influye en mi forma de ver la vida. Ponerse en otra piel relaja el alma.
-Empezó a bailar por el olor. ¿Es así?
-Lola Grande, ¡qué bien olía! Una tarde me colé en su clase de ballet. Se impartía en un gimnasio y hacía mucho frío, pero el olor de Lola abrigaba y, además, era el único sitio del colegio donde no había ni gritos.
-Dicen que una persona que mantiene los amigos de su infancia es alguien de fiar, ¿tiene al día su agenda escolar?
-Pues algunos sí y otros se han ido diluyendo por culpa de la distancia.
-Y a mí que me da la sensación de que está en permanente pelea con el aire.
-Es una relación desigual entre la mente y el resto del cuerpo. Sabemos de nuestras limitaciones físicas pero el sistema límbico es exigente y pide más.
-Dígame, para volar, ¿qué es lo mejor?
-Tener un buen partenaire es lo que más ayuda.
-Observo tres constantes en su vida: sacrificio, suerte y generosidad.
-Te falta la sed de conocer y el perfeccionismo.
-Quería ser el Quijote de la danza y volver a España con el caballo y pelear. ¿Quién sería su Sancho?
-La danza en España no necesita Quijotes sino profesionalismo. Cuando sea considerada como el Arte con mayúsculas que es, sin paternalismos ni falsos mesianismos, que muchas veces encubren muchas vergüenzas, probablemente logre el estatus que merece. En cuanto a Sancho, en España hay unos cuantos, también en la danza.
-Con perdón... ¿Cuánto tiempo debe estar una bailarina sobre los escenarios?
-Sin perdón alguno: el que pueda, el que quiera ella y, sobre todo, el público.
-Salió de España con una mano delante y otra detrás y llegó a ser portada del «Times». ¿Me da el teléfono de su «coach»?
-Sin querer relegar las ayudas y consejos de personas a las que admiro como Ricardo Cue y Boris Trailine, no me gustaría dar a entender que la carrera profesional de una bailarina de danza clásica depende del «coach» o de un manager.
-Si ya de pequeña apuntaba maneras de determinación... ¿No es cierto que se sabía Viridiana de Memoria?
-(Risas) Mi padre es un fan de Buñuel y creo que de crío estuvo en alguna toma de Viridiana. En casa sólo se veía «La Clave» y películas de Buñuel, Fellini, Godard...
-¡Qué duro!: ¿una infancia sin E.T?
-Yo nunca vi E.T.
-¿Tampoco pelis de Disney?
-De niña uno de mis personajes favoritos era Blancanieves porque era morena. Era la única película de Disney en que la protagonista tenía el pelo negro, como yo. Me molestaba que todas la heroínas fueran rubias y todas las malas tuvieran el pelo oscuro. ¡Incluso la barbie era rubia! Por eso jamás tuve una muñeca de esas.
-¿Se sigue sintiendo de Chamberí?
-¡Y devota de las fiestas de San Isidro! Aunque... se es también de donde se pace y es de buen nacido ser agradecido, ¿no?
-Me ha dicho un pajarito, que suele decir lo que no debe... ¿la mayor metedura de pata fue...?
-No es tanto que meta la pata, es que no me gusta morderme la lengua cuando veo cosas que no me parecen bien y eso, en nuestro país, sobre todo a los que mandan, no les hace mucha gracia.
-Cuando le dieron el Príncipe de Asturias, ¿qué le dijo Don Felipe?
-«A ver si podemos hacer algo por la danza».
-¿Y...?
-Lo que se ha hecho desde entonces puedes comprobarlo fácilmente.
-Siempre he querido preguntárselo: Giselle, ¿es inocente o boba de remate?
-Es una adolescente del siglo XIX descrita por un poeta romántico francés. A la pobre Giselle nadie le dice que los nobles son unos aprovechados acostumbrados al derecho de pernada. De todas formas, siempre queda la duda sobre si es tonta o se hace la tonta.
-¿Le ha tocado soportar a muchos pagafantas... o a las bailarinas las dejan en paz?
-No domino ese término pero si es lo que me figuro, me ha tocado alguno pero sin graves consecuencias.
-Le fascinan los zapatos, confiese: ¿tiene unos «manolos»?
-Todavía no, pero ganas sobran. A pesar de que los pies de las bailarinas son un drama, tengo unos Jimmy Choo.
-¿Cómo ve la política del Gobierno desde Londres?
-Con la debida distancia.
-¿También le llegan las desavenencias de la oposición?
-Leo los periódicos españoles los fines de semana, pero no sigo el politiqueo partidista, es muy aburrido.
-Los expertos dicen que nunca hemos tenido una clase política tan mediocre.
-Los expertos a lo peor también pertenecen a la misma casta, nunca se sabe.
-Volviendo a la danza, ¿a Nacho Duato habría que darle un tirón de orejas?
-Duato es un gran artista que merece toda mi consideración. Sin embargo, no estoy de acuerdo con algunas de sus decisiones y estrategias. Él representa un estilo estimable pero la danza, la actual y la clásica, es mucho más amplia.
-¿Le cabe la maternidad en sus planes?
-Como puedes imaginar, no de momento.
-Y la librería en la costa... ¿también la pospone?
-He tenido que rendirme a la evidencia, otra vez será.
-¿No me diga que tampoco ha logrado conocer a Benicio del Toro?
-Ni a él ni a Joaquin Phoenix. No consigo que me los presenten. ¿Podrías hacer algo? (Risas).
Un salto contra la ley de la gravedad
Imposible encontrar a Tamara con las piernas de la lógica, mal cruzadas. Ni mal vestida su opinión; ni despeinado su talante... Cincelada su cabeza -a la par que sus miembros- a golpe de diapasón, es, exactamente, lo que quiere ser en cada momento. Y ninguna otra cosa distinta. Con una vida entregada a los aviones, los escenarios y a vencer la ley de la gravedad no pierde ni un segundo la gracia y la perfección. Desde luego, viéndola volar sobre las tablas, a uno le acechan todas sus incómodas tosquedades...
Fuente: larazon.es
20 jul 2009
Casting de Fama en Madrid en Nuestra Sede Actual
Cómo sabéis nos hemos mudado, nuestro showroom y nuestra oficina ahora están en el edificio de la Fundación 7 Claves que preside Lola Gonzalez. El edificio dedicado a las artes, tiene una escuela de baile, un plató de televisión y distintos negocios relacionados con las artes.
Será aquí en la sala-plató de nuestro edificio donde tendrán lugar los casting de la nueva edición de Fama, ¡a bailar! este 23 y 24 de julio.
Madrid, supone la primera parada de los castings de "Fama" el jueves y viernes. Después recorrerán Ibiza, Valencia, Málaga, Barcelona, Alicante y Las Palmas.
Cuatro y Zeppelin TV comienzan la búsqueda de bailarines para la tercera edición de “Fama ¡a bailar!”. Las puertas de la Escuela no tardarán en abrirse para recibir a los nuevos concursantes, que comenzará su andadura en Cuatro muy pronto.
No te lo pierdas este jueves y viernes 23 y 24 de julio, Lola González, jefa de estudios de “Fama”, recibirá a todos los aspirantes en la Sala de la Fundación Siete Claves. Sede actual de Por Alegría.
C/Mártires de la Ventilla, 68. Metro: Ventilla y Plaza de Castilla
A partir de las 09:00 horas.
Tras las pruebas en la capital, los castings llegarán a Ibiza el 27 de julio, para detenerse después en tres puntos de la costa levantina: el 29 de julio en Valencia, el 31 en Barcelona y el 4 de agosto en Alicante. En Andalucía, la ciudad elegida será Málaga, el 6 de agosto; y, por último, las pruebas de selección llegarán el 11 de agosto a Las Palmas.
El proceso del casting se vertebrará en dos fases. La primera constará de dos pruebas: una individual, en la que cada aspirante se preparará una coreografía libre, y otra prueba colectiva, en la que los profesores marcarán una coreografía que los aspirantes, en un breve período de tiempo, tendrán que ejecutar.
En la segunda fase, los aspirantes seleccionados en las audiciones realizadas en las diferentes ciudades de España serán concentrados en Madrid, de donde saldrán los futuros concursantes de la tercera edición de “Fama ¡a bailar!”.
Para inscribirse en esta convocatoria sólo hay que llamar al 806 51 74 84 y entrar en el site del programa www.cuatro.com/fama.
Os esperamos!
17 jul 2009
Tamara Rojo y Rafael Bonachela en "Dance House"
La primera figura del Royal Ballet de Londres, la española Tamara Rojo, y el coreógrafo residente del Southbank Centre de la capital británica, Rafael Bonachela, son dos de los artistas que apuntalarán el último gran proyecto de danza en el Reino Unido, la creación del centro "Dance House".
Según indicó hoy Assis Carreiro, la directora artística de DanceEast, compañía responsable de proyecto, los dos artistas españoles colaborarán con el nuevo centro de danza a lo largo de su primera temporada en activo, que comienza el próximo 9 de octubre.
El objetivo de esta iniciativa, que cuenta con un presupuesto de 8,9 millones de libras (unos 10,3 millones de euros), es promocionar la danza entre la comunidad local y proporcionar un espacio adecuado donde poder desarrollar el talento, todo ello enriquecido con las actuaciones de reconocidas figuras a nivel internacional.
"Queremos apoyar a los nuevos artistas antes de que salgan de gira en solitario, proporcionándoles un lugar para bailar, crear y aprender, y no sólo una habitación donde moverse", apuntó la directora.
Localizada en la localidad de Ipswich, al este de Inglaterra, la "Dance House" se convertirá en otoño en uno de los mayores centros de baile de Europa, con más de 2.500 metros cuadrados de superficie, en los que habrá espacio para un teatro con capacidad para 200 personas.
La puesta de largo del proyecto tendrá lugar el próximo 7 de noviembre, y en ella estarán presentes la bailarina española nacida en Canadá Tamara Rojo y la Bonachela Dance Company, dirigida por el catalán Rafael Bonachela.
Además, también actuarán bailarines de la talla de Akram Khan, Wayner McGregor, Leanne Benjamin o Sylvie Guillem.
Tamara Rojo es actualmente la primera bailarina del Royal Ballet en el Covent Garden y actúa como artista invitada en compañías como el Ballet de la Scala, The Nacional Ballet of China o el Ballet Nacional de Cuba, entre otras.
Bonachela, por su parte, cuenta con una larga y exitosa carrera en el Reino Unido, donde fue galardonado con el prestigioso premio "The Place", en 2004, tras más de 14 años como alumno predilecto de la Rambert Dance Company. Asimismo, fue nombrado a finales del pasado año director artístico de la Compañía de Danza de Sídney (Australia).
Fuente: EFE
Según indicó hoy Assis Carreiro, la directora artística de DanceEast, compañía responsable de proyecto, los dos artistas españoles colaborarán con el nuevo centro de danza a lo largo de su primera temporada en activo, que comienza el próximo 9 de octubre.
El objetivo de esta iniciativa, que cuenta con un presupuesto de 8,9 millones de libras (unos 10,3 millones de euros), es promocionar la danza entre la comunidad local y proporcionar un espacio adecuado donde poder desarrollar el talento, todo ello enriquecido con las actuaciones de reconocidas figuras a nivel internacional.
"Queremos apoyar a los nuevos artistas antes de que salgan de gira en solitario, proporcionándoles un lugar para bailar, crear y aprender, y no sólo una habitación donde moverse", apuntó la directora.
Localizada en la localidad de Ipswich, al este de Inglaterra, la "Dance House" se convertirá en otoño en uno de los mayores centros de baile de Europa, con más de 2.500 metros cuadrados de superficie, en los que habrá espacio para un teatro con capacidad para 200 personas.
La puesta de largo del proyecto tendrá lugar el próximo 7 de noviembre, y en ella estarán presentes la bailarina española nacida en Canadá Tamara Rojo y la Bonachela Dance Company, dirigida por el catalán Rafael Bonachela.
Además, también actuarán bailarines de la talla de Akram Khan, Wayner McGregor, Leanne Benjamin o Sylvie Guillem.
Tamara Rojo es actualmente la primera bailarina del Royal Ballet en el Covent Garden y actúa como artista invitada en compañías como el Ballet de la Scala, The Nacional Ballet of China o el Ballet Nacional de Cuba, entre otras.
Bonachela, por su parte, cuenta con una larga y exitosa carrera en el Reino Unido, donde fue galardonado con el prestigioso premio "The Place", en 2004, tras más de 14 años como alumno predilecto de la Rambert Dance Company. Asimismo, fue nombrado a finales del pasado año director artístico de la Compañía de Danza de Sídney (Australia).
Fuente: EFE
Nacho Duato presenta 'Na Floresta' en Rusia
El bailarín y coreógrafo español Nacho Duato afirmó hoy que está "contentísimo" con la marcha de los ensayos de "Na floresta" la primera obra de ballet que presenta en Rusia, cuyo estreno tendrá lugar el próximo día 24 de julio en el teatro Stanislavsky y Nemiróvich-Dánchenko.
"Este es el primer ballet que hago en Rusia. Hacía ya mucho que me apetecía venir y trabajar con una compañía rusa, porque siempre he admirado su escuela, sus bailarines, su profesionalidad, sus teatros, sus espectáculos", dijo Duato en una rueda de prensa celebrada en una de las salas del teatro moscovita.
Por su parte, el director artístico del ballet del Stanislavsky y Nemiróvich-Dánchenko, Serguéi Filin, se deshizo en elogios para su huésped español al presentarlo a la prensa y destacó que la presencia de Duato es una "gran fiesta" para su teatro.
El director desde hace veinte años de la Compañía Nacional de Danza (CND) de España se mostró muy satisfecho de los preparativos de la presentación de su ballet ante el público de la capital rusa. "Ayer estuve con ellos por primera vez ensayando y estoy contentísimo, porque son unos bailarines de primera calidad, de categoría. Son una maravilla", resaltó.
A la pregunta sobre su afición por la equitación, Duato contestó que ahora, como baila menos que antes, puede permitirse montar y agregó: "Los seres vivientes más elegantes y más bonitos en el mundo son los bailarines y los caballos".
El director de la CND dijo que no se considera ciudadano del mundo. "Yo soy de Valencia, me siento muy mediterráneo y después de veinte años trabajando para una compañía nacional, cada vez me siento más de mi país, me siento más español", subrayó.
Sobre su futuro como director de la CND, cargo que ya no tendrá que abandonar el 31 de julio de 2010, en aplicación del Código de Buenas Prácticas del Ministerio de Cultura, Duato eludió entrar en detalles. "Ahora mismo con la nueva ministra (de Cultura, Ángeles González-Sinde) las relaciones son muchísimo más cordiales y estamos trabajando para que, pase lo que pase, tratar de no restar nada de todos estos años de trabajo", dijo a medios españoles al término de la rueda de prensa. Fue categórico al afirmar: "Hagamos lo que hagamos, no vamos a dañar a la compañía".
"Para 2010 tengo 10 estrenos, giras por todo el mundo, y yo sigo trabajando; luego, en 2011, veremos qué pasa", concluyó Duato.
Fuente: EFE
"Este es el primer ballet que hago en Rusia. Hacía ya mucho que me apetecía venir y trabajar con una compañía rusa, porque siempre he admirado su escuela, sus bailarines, su profesionalidad, sus teatros, sus espectáculos", dijo Duato en una rueda de prensa celebrada en una de las salas del teatro moscovita.
Por su parte, el director artístico del ballet del Stanislavsky y Nemiróvich-Dánchenko, Serguéi Filin, se deshizo en elogios para su huésped español al presentarlo a la prensa y destacó que la presencia de Duato es una "gran fiesta" para su teatro.
El director desde hace veinte años de la Compañía Nacional de Danza (CND) de España se mostró muy satisfecho de los preparativos de la presentación de su ballet ante el público de la capital rusa. "Ayer estuve con ellos por primera vez ensayando y estoy contentísimo, porque son unos bailarines de primera calidad, de categoría. Son una maravilla", resaltó.
A la pregunta sobre su afición por la equitación, Duato contestó que ahora, como baila menos que antes, puede permitirse montar y agregó: "Los seres vivientes más elegantes y más bonitos en el mundo son los bailarines y los caballos".
El director de la CND dijo que no se considera ciudadano del mundo. "Yo soy de Valencia, me siento muy mediterráneo y después de veinte años trabajando para una compañía nacional, cada vez me siento más de mi país, me siento más español", subrayó.
Sobre su futuro como director de la CND, cargo que ya no tendrá que abandonar el 31 de julio de 2010, en aplicación del Código de Buenas Prácticas del Ministerio de Cultura, Duato eludió entrar en detalles. "Ahora mismo con la nueva ministra (de Cultura, Ángeles González-Sinde) las relaciones son muchísimo más cordiales y estamos trabajando para que, pase lo que pase, tratar de no restar nada de todos estos años de trabajo", dijo a medios españoles al término de la rueda de prensa. Fue categórico al afirmar: "Hagamos lo que hagamos, no vamos a dañar a la compañía".
"Para 2010 tengo 10 estrenos, giras por todo el mundo, y yo sigo trabajando; luego, en 2011, veremos qué pasa", concluyó Duato.
Fuente: EFE
16 jul 2009
Casting de Cantantes, Bailarines y Músicos
Queridos seguidores, os trasladamos una convocatoria de Casting para un nuevo proyecto audiovisual dirjido por Mapi Laguna (google.com) y con el asesoramiento musical de Paco Ortega.
Buscan gente con grandes aptitudes para el cante, el baile y la instrumentación.
Buscan talento y capacidad de innovar. Todo tipo de instrumentos, estilos y voces. Gente que destaque en cualquiera de estos campos.
El perfil es de 18 a 24 años, tanto hombres como mujeres. (Criterio estricto en el que pondrán especial atención)
Si estás interesado envía tus datos junto a una fotografía y tu especialidad a casting.esposible@gmail.com y contactarán contigo.
Nos podemos facilitaros el nombre de la productora pero os aseguramos que estáis en buenas manos.
Animaros!
Buscan gente con grandes aptitudes para el cante, el baile y la instrumentación.
Buscan talento y capacidad de innovar. Todo tipo de instrumentos, estilos y voces. Gente que destaque en cualquiera de estos campos.
El perfil es de 18 a 24 años, tanto hombres como mujeres. (Criterio estricto en el que pondrán especial atención)
Si estás interesado envía tus datos junto a una fotografía y tu especialidad a casting.esposible@gmail.com y contactarán contigo.
Nos podemos facilitaros el nombre de la productora pero os aseguramos que estáis en buenas manos.
Animaros!
15 jul 2009
Fotos del VIII Maratón de Danza de Madrid
Aquí os dejamos algunas de nuestras fotos del VIII Maratón de Danza de Madrid.
Para cualquier consulta o pedido escribir a paloma@por-alegria.com
Para cualquier consulta o pedido escribir a paloma@por-alegria.com
14 jul 2009
Duato no tendrá que abandonar su puesto en 2010
La danza contemporánea ha entrado fuerte en el corazoncito del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM). De disciplina olvidada pasa a ser el caballo de batalla del recién nombrado director general, Félix Palomero, que ayer avisó del "peligro de extinción" que corre si no se le presta atención. Así que se frena la construcción de la Ciudad de las Artes Escénicas que se iba a montar en Getafe, se para también la conversión del INAEM en Agencia Estatal y se acelera la conclusión del Plan General de la Danza, listo para el próximo mes de noviembre.
Desde la dirección encuentran dramático que haya espectáculos que se estrenen y se mueran al día siguiente por falta de espectadores, como lleva ocurriendo desde hace años por otra parte. Lo cierto es que la situación de la danza contemporánea es tan complicada como el resto de las artes escénicas, pero sin una red de exhibición detrás y otras ayudas que fomenten la divulgación de la disciplina que más trabaja por la investigación y el riesgo en escena.
Así que el proyecto insignia de los próximos años del nuevo equipo del INAEM será la creación de un Centro de Danza en Madrid, que de cobijo a la Compañía Nacional de Danza (CND) y al Ballet Nacional de España (BNE), y a compañías de danza contemporánea... sólo residentes invitadas. Todo esto con un presupuesto que el año que viene se verá recortado en un 10%.
Tiempo de negociaciones
Félix Palomero tendrá que desplegar todas sus armas de conciliador que empleó en la Orquesta Nacional, durante su estancia como gerente, para tratar de esquivar el escollo Nacho Duato. Palomero aclaró que el coreógrafo, que lleva dirigiendo la CND desde 1990, no tendrá que abandonar su puesto el 31 de julio de 2010 como estaba pactado, porque se necesita un periodo de transición, pero que en ningún caso "podrá atarse al sillón". Al tiempo, Duato daba una rueda de prensa en Matadero presentando la nueva temporada de su compañía y amenazaba con un rotundo "si la CND quiere tener la firma de Duato, tendré que estar presente".
No sin él
En estos 20 años la CND se ha convertido en una compañía de autor y desde el INAEM apuntan que ese modelo es un error y debe cambiar. Pero antes habrá que negociar los derechos de explotación de todas esas coreografías que Duato creó con dinero público y que por contrato, como el artista señala, le pertenecen. "Son trabajos que no los puede dirigir otra persona más que yo", señaló. El anterior director del INAEM, Juan Carlos Marset, aseguró hace unos meses que las coreografías que Duato ha creado para la CND son patrimonio público. Sin embargo, en el Ministerio de Cultura manifestaron ayer que tendrían que revisar bien el contrato del bailarín porque no saben si tiene el derecho de explotación de sus obras. En cualquier caso, Duato ya ha planteado con seguridad su intención de quedarse como asesor de la compañía, "que es lo que se hace en todas partes", apostilló.
"Tenemos que negociar y llegar a un acuerdo para que no se destruya todo el trabajo de 20 años, algo en lo que los anteriores [Juan Carlos Marset y César Antonio Molina] no pensaron", argumentó con torería. Porque ahora las riendas las lleva Duato. De hecho, podría darse el caso en que el jurado tuviera en la mesa la candidatura del mismo Duato a la hora de elegir al nuevo director de la CND, que reemplazase al propio Duato. "Si se convoca el año que viene, a lo mejor me presentó, pero la verdad es que no he pensado qué haré", concluyó el coreógrafo.
Fuente: publico.es
A ver qué hacen al final porque con tanto cambio ya no se puede fiar uno...
En Por Alegría admiramos el trabajo que durante estos 20 años ha realizado Nacho Duato y por supuesto esperamos siga al mando de la Compañía Nacional de España.
Desde la dirección encuentran dramático que haya espectáculos que se estrenen y se mueran al día siguiente por falta de espectadores, como lleva ocurriendo desde hace años por otra parte. Lo cierto es que la situación de la danza contemporánea es tan complicada como el resto de las artes escénicas, pero sin una red de exhibición detrás y otras ayudas que fomenten la divulgación de la disciplina que más trabaja por la investigación y el riesgo en escena.
Así que el proyecto insignia de los próximos años del nuevo equipo del INAEM será la creación de un Centro de Danza en Madrid, que de cobijo a la Compañía Nacional de Danza (CND) y al Ballet Nacional de España (BNE), y a compañías de danza contemporánea... sólo residentes invitadas. Todo esto con un presupuesto que el año que viene se verá recortado en un 10%.
Tiempo de negociaciones
Félix Palomero tendrá que desplegar todas sus armas de conciliador que empleó en la Orquesta Nacional, durante su estancia como gerente, para tratar de esquivar el escollo Nacho Duato. Palomero aclaró que el coreógrafo, que lleva dirigiendo la CND desde 1990, no tendrá que abandonar su puesto el 31 de julio de 2010 como estaba pactado, porque se necesita un periodo de transición, pero que en ningún caso "podrá atarse al sillón". Al tiempo, Duato daba una rueda de prensa en Matadero presentando la nueva temporada de su compañía y amenazaba con un rotundo "si la CND quiere tener la firma de Duato, tendré que estar presente".
No sin él
En estos 20 años la CND se ha convertido en una compañía de autor y desde el INAEM apuntan que ese modelo es un error y debe cambiar. Pero antes habrá que negociar los derechos de explotación de todas esas coreografías que Duato creó con dinero público y que por contrato, como el artista señala, le pertenecen. "Son trabajos que no los puede dirigir otra persona más que yo", señaló. El anterior director del INAEM, Juan Carlos Marset, aseguró hace unos meses que las coreografías que Duato ha creado para la CND son patrimonio público. Sin embargo, en el Ministerio de Cultura manifestaron ayer que tendrían que revisar bien el contrato del bailarín porque no saben si tiene el derecho de explotación de sus obras. En cualquier caso, Duato ya ha planteado con seguridad su intención de quedarse como asesor de la compañía, "que es lo que se hace en todas partes", apostilló.
"Tenemos que negociar y llegar a un acuerdo para que no se destruya todo el trabajo de 20 años, algo en lo que los anteriores [Juan Carlos Marset y César Antonio Molina] no pensaron", argumentó con torería. Porque ahora las riendas las lleva Duato. De hecho, podría darse el caso en que el jurado tuviera en la mesa la candidatura del mismo Duato a la hora de elegir al nuevo director de la CND, que reemplazase al propio Duato. "Si se convoca el año que viene, a lo mejor me presentó, pero la verdad es que no he pensado qué haré", concluyó el coreógrafo.
Fuente: publico.es
A ver qué hacen al final porque con tanto cambio ya no se puede fiar uno...
En Por Alegría admiramos el trabajo que durante estos 20 años ha realizado Nacho Duato y por supuesto esperamos siga al mando de la Compañía Nacional de España.
13 jul 2009
El Ballet Nacional de España en Rusia
El Ballet Nacional de España (BNE) actuará el miércoles día 15 de julio, por vez primera en el festival "Estrellas de las Noches Blancas" de Rusia.
La compañía española escenificará mañana en el mundialmente famoso teatro Mariinsky de San Petersburgo los espectáculos "Elegía" y "Café de Chinitas".
"Elegía", estrenada en 1999, es un homenaje al mítico bailarín español Antonio Ruiz Soler, que también ejerció el cargo de director del BNE (1980-83). Mientras, "Café de Chinitas" rinde tributo al pintor Salvador Dalí, haciendo "en clave flamenca" un uso prolífico de su mundo surrealista para la puesta en escena. La pieza utiliza también canciones populares compuestas por el poeta Federico García Lorca, con el que el pintor mantuvo una tormentosa relación.
El BNE pondrá es escena, el viernes, "Leyenda", montaje con coreografía del director de BNE, José Antonio, estrenado en 2002 y que rememora la figura de la bailaora Carmen Amaya; y "Dualia" coreografía creada por Rojas y Rodríguez para el BNE, con música de José Nieto, conocido compositor de bandas sonoras de películas.
La presencia en Rusia del BNE se enmarca en la gira mundial que conmemora los 30 años desde su fundación en 1978.
Fuente: eldiariodeleon.es
La compañía española escenificará mañana en el mundialmente famoso teatro Mariinsky de San Petersburgo los espectáculos "Elegía" y "Café de Chinitas".
"Elegía", estrenada en 1999, es un homenaje al mítico bailarín español Antonio Ruiz Soler, que también ejerció el cargo de director del BNE (1980-83). Mientras, "Café de Chinitas" rinde tributo al pintor Salvador Dalí, haciendo "en clave flamenca" un uso prolífico de su mundo surrealista para la puesta en escena. La pieza utiliza también canciones populares compuestas por el poeta Federico García Lorca, con el que el pintor mantuvo una tormentosa relación.
El BNE pondrá es escena, el viernes, "Leyenda", montaje con coreografía del director de BNE, José Antonio, estrenado en 2002 y que rememora la figura de la bailaora Carmen Amaya; y "Dualia" coreografía creada por Rojas y Rodríguez para el BNE, con música de José Nieto, conocido compositor de bandas sonoras de películas.
La presencia en Rusia del BNE se enmarca en la gira mundial que conmemora los 30 años desde su fundación en 1978.
Fuente: eldiariodeleon.es
11 jul 2009
Antonio 'El Bailarín'
Antonio Ruiz Soler (Sevilla, 1921 - Madrid, 1996), una personalidad clave en la historia de la danza española, por su innovación, difusión y creación en este arte.
Comenzó a los 6 años en la academia del Maestro Realito, que le inició especialmente en los bailes de palillos. Calificado como niño prodigio, fue allí donde conoció a la bailarina y bailaora Rosario y con quien empezó a bailar profesionalmente con tan sólo 7 años. Una pareja artística que duraría hasta 1952 y que recorrería el mundo.
La primera actuación junto con Rosario fue en 1928, en el Teatro Duque de Sevilla, a los siete años. Ese mismo año bailó en el Pasaje de Oriente, en una fiesta que se daba en honor del infante D. Carlos, y también dentro del mismo año efectúa su primera salida al extranjero, bailando en la Feria Internacional de Lieja (Bruselas).
En 1929 bailó ante los reyes de España Alfonso XIII y Victoria Eugenia, cuando fueron a presidir la Exposición Iberoamericana de Sevilla (1929). Alternando con las actuaciones teatrales, baila en los cafés concierto, en fiestas privadas y en fiestas tradicionales andaluzas como en las Cruces de Mayo. Es la primera etapa infantil sevillana, en la cual termina de formarse con los maestros de baile Otero, Pericet y se especializa en flamenco con el maestro Frasquillo. Enseguida empieza a trabajar fuera de Sevilla, por el resto de Andalucía, otras provincias y Madrid, donde les llaman Los Chavalillos Sevillanos.
El año 1937 es una fecha clave para el bailarín. El empresario de variedades Marquesi le contrata junto a Rosario para ir a América, donde permanecerían durante 12 años. Comenzó a conocerse a esta pareja de baile como Antonio y Rosario y adquirieron fama mundial.
La primera actuación es en Argentina, en 1937, en el Teatro Maravillas de Buenos Aires, con el espectáculo Las maravillas del Maravillas. De Argentina pasan a Chile, Perú, Colombia, Venezuela, Cuba y México. Vuelven a Argentina, para actuar en el Teatro Espléndido y en el Teatro Ateneo de Buenos Aires, donde dan el primer Concierto de Danza. Rematan la gira sudamericana en Brasil.
Es en 1939 cuando son contratados para la Sala de Fiestas del Waldorf-Astoria de Nueva York. Con ello se les abren las puertas de Estados Unidos. Permanecen allí siete años alternando temporadas largas en esta sala con viajes a Hollywood, donde participan en varias películas. En 1943, de vuelta a Nueva York, se presentan en el Teatro Carnegie Hall. En 1946 van a Cubamás y Antonio escenifica el Corpus Christi en Sevilla (de Albéniz).
En 1946 van a Méjico donde estrenan, en el Teatro Bellas Artes, el famoso Zapateado de Sarasate, coreografía maestra de baile individual, su baile más aclamado y que más veces ha interpretado durante su carrera artística. Siguen por Cuba, Uruguay, Perú, Chile y en 1948 vuelven a Argentina donde los críticos, diez años despues de su primera actuación allí, destacan la madurez en su baile y sus coreografías.
Durante todo el perodo americano, la labor coreográfica y representativa de esta pareja es muy extensa. A parte del Zapateado, la jota Viva Navarra de Larrega, y el Zorongo gitano, son dos piezas fundamentales en su carrera. De Granados tienen una selección de Goyescas y las Danzas Número IX y VII (Valenciana), de Joaquín Turina, el Sacromonte, la Malagueña y Sevilla de Albéniz. El Café de Chinitas, con letras de García Lorca. De danzas de escuela: seguidillas manchegas, panaderos, boleros, sevillanas y fandangos de Huelva. Preparan también El amor brujo y El Sombrero de tres picos, de Manuel de Falla. Y por último el testimonio de la inspiración americana y caribeña en los bailes El manisero y Jarana yucateca.
De vuelta a España, en 1949, actúan en el Teatro Fontalba durante dos meses y más tarde en el Teatro San fernando de Sevilla con un exito enorme.
Inician poco después su primera gira por Europa,una gira que se inicia en primavera, en el Teatro de Champs Elysées de París. Continúan por Italia, Suiza, Dinamarca, Suecia, Inglaterra, Bélgica, Escocia en los Festivales de Edimburgo en 1949 y en el Festival Internacional de Holanda. Actuan también en Israel y vuelven a recorrerse Europa por segunda vez: teatros Palais Chaillot, la Pérgola, Cambridge. Van a Tánger. Son requeridos para bailar en fiestas de hombres de estado: en España, Francia, en Egipto, Faruk. Tres años de gira sin descanso, siempre triunfantes.
Se añadieron, es ésta gira europea, nuevas coreografías como Granada, Triana, Puerta de Tierra, El Puerto, Asturias y Navarra de Albeniz, El Fandango de Candil y las Danzas V, X y XI (Sortilegio de los collares) de Granados, El zapateado de Turina, Las Cigarreras de Halffter, Selección del Capricho Español de Rimski-Kórsakof y Debajo de la Hoja, Anda jaleo y Los cuatro muleros donde Federico García Lorca adquiere ya una dimensión especial dentro del repertorio de Antonio.
Nuevas versiones de bailes de palillos como el Bolero Robado, Boleras de medio paso, Malagueñas boleras. En flamenco: tanguillo, alegrías, farruca, tango de Cádiz, tarantos, serranas, siguiriyas gitanas, soleares, caracoles, fandangos por verdiales, y hay que reseñar de una manera especial La Caña, creación que perfeccionará a lo largo de los años, para llegar a ser uno de los números más perfectos conjuntados.
En 1952, tras haber trabajado durante 22 años juntos, la pareja Rosario-Antonio se separa definitivamente por desavenencias artísticas.
Rota la pareja, Antonio saca adelante el proyecto de crear una gran compañía, Antonio Ballet Español. Empieza a madurarlo en solitario en Sevilla y le da forma en Madrid en los estudios de baile que Juan María Bourio tenía en la calle Montera.
Es requerido entonces por el escritor y director cinematográfico Edgar Neville para protagonizar su película Duende y misterio del flamenco, pidiéndole que interpretara algo original y nuevo. Para la ocasión crea el Martinete, estilo flamenco que hasta entonces sólo estaba reservado al cante.
Como reconocimiento mundial Leónidas Massine, coreógrafo de los Ballets rusos, le propone bailar como primera figura en su coreografía de El sombrero de tres picos en el Teatro de la Scala de Milán, santuario de la danza reservado a muy pocos. Se hará realidad el año siguiente junto al Capricho español de Nikolai Rimski-Korsakof.
En 1953 se presenta al público la primera Compañía de Ballet de Antonio y el consiguiente estreno de las nuevas obras que lo componen. Quizá sea para él, el año que más valore dentro de su carrera artística. Se presenta el 20 de julio en el Festival Internacional de Música y Danza de Granada, con estreno también de escenario, los Jardines del Generalife.
El nombre de la compañía es Antonio Ballet Español. Lo componen treinta y cinco bailarines, con Rosita Segovia como primera figura femenina. Es un ballet bien presentado, disciplinado y sin fallos técnicos que obtiene un éxito rotundo. Como consecuencia, ya desde ahora este Festival incluirá habitualmente una parte de baile español. Él responderá a esta distinción creando nuevos ballets para tal acontecimiento.
Las obras que estrena son: Llanto por Manuel de Falla, de Vicente Asensio. Es un montaje en atención a Granada y su músico más genuino. Presenta también Allegro de conciertos de Granados, y piezas flamencas como las alegrías y fandangos por verdiales en versión nueva. También agrupa otra serie de piezas del mismo estilo en Serranas de Vejer de García Soler. Pero las dos obras más destacadas del estreno son la Suite de sonatas de P. Antonio Soler, de las que ya tenía un antecedente en el repertorio de sus bailes con Rosario donde las bailaba él sólo. Ahora son ocho sonatas realizadas por toda la compañía en distintos cuadros. Otro estreno es la Suite de danzas vascas, con música tradicional y danzas tan populares como el Aurresku, Espatadanza y Arín Arín. Por último el ballet El segoviano esquivo de Matilde Salvador, con un argumento que da forma a bailes castellanos.
Despues del estreno en Granada, Antonio va al Teatro Español de Madrid y desde allí ya es una gira constante e imparable por ciudades españolas, otras de Europa, América e incluso África, como El Cairo y Johannesburg. Todas las éstas actuaciones tienen en común el éxito obtenido, por ejemplo cuando debuta su compañía en el Teatro Empire de París, le sacan a hombros. En el Teatro Stoll de Londres se gana a un público que mira con reserva al nuevo coreógrafo. Son estas dos capitales europeas los puntos más visitados por él y donde más estrena, lo mismo que en América el punto de referencia artística siempre es Buenos Aires. Allí, en 1954, estrena una serie de danzas: Almería de Albéniz, Andaluza de Falla, Danzas fantásticas de Turina y renueva la famosa jota Viva Navarra. Tanta actividad obligó a aumentar el elenco de bailarines de la Compañía.
1955 es un año de estrenos importantes en Londres. En el Teatro Palace, la Rondeña y el Albaicín de Albéniz, con formas modernas de escenografía y baile. Pero el estreno más señalado es El Amor Brujo de Falla, en el Teatro Saville, ballet que le consagra como coreógrafo y donde según la crítica se compenetra con el espíritu mismo de Falla. Es obra de gran éxito que pasa directamente al Teatro de Champs Elysées de París y luego a la Scala de Milán durante un mes, además de dos funciones en el Picolo Scala donde se oyó cantar flamenco por primera vez.
En 1956 se estrena en el Festival de Música y Danza de Granada Fantasía galaica, ballet de Ernesto Halffter, basado en una leyenda gallega sobre la Santa Compaña, con temas de bailes populares como la muñeira. Paso a cuatro de Pablo Sorozábal, son seis danzas inspiradas en melodías de compositores del siglo XVIII y Sonatina, obra basada en la poesía de Rubén Darío La princesa está triste. El polo de Albéniz, Cerca del Guadalquivir, ballet flamenco sobre el poema de García Lorca, Prendimiento de Antonio el Camborio.
1957 es una fecha señalada para la historia de la danza española por la actuación de Antonio en la Ópera de Viena. En 1958 realiza la coreografía del ballet más interesante de cuantos ha hecho, El sombrero de tres picos de Falla. Las versiones anteriores, incluso la de Massine, quedan chicas al lado de ésta, con unos figurines de Muntañola que no desdicen en nada de los de Picasso. La Farruca del Molinero es un acierto de coreografía e interpretación. Rosita Segovia contribuye con su buen hacer danza-actriz al éxito general de este ballet.
En 1960 la compañía actua en el Liceo de Barcelona. Estrenan más obras de Albéniz y Jugando al toro de E. Halffter. Es esta una época de evolución en el concepto creativo de Antonio. Busca temas simbólicos de contenido recargado como sucede en la obra citada y en Eterna Castilla, aunque los decorados sean estilizados, el baile no lo es.
En 1962 es el reencuentro con Rosario, Antonio la presenta como artista invitada dentro de su ballet, dejando que aparezca sola en el escenario bajo una luz central. Vuelve a bailar aquellas danzas sencillas, encantadoras, que no han pasado de moda y que el público acoge con gran entusiasmo; en Madrid tiene que repetir el Zorongo tres veces. También bailan dentro de la estampa flamenca La Taberna del Toro que Antonio estrenó en el Teatro Palace de Londres seis años antes.
En 1964, vuelve a reunirse la pareja por última vez, para hacer una tourneé con etapas en España en Inglaterra, en los Teatro Opera House y Royal Druy Lane de Londres; van a Rusia por primera vez y actúan en Leningrado, Kiev y Moscú, donde triunfaron como en el resto de los países; Siguen por Estados Unidos y Sudamérica, donde, en Chile, Rosario termina con el compromiso.
En 1965, Antonio cambia el nombre de su compañía llamándola desde ahora Antonio y sus Ballets de Madrid. Con este nombre o con el anterior y durante más de diez años toma parte muy activa en los Festivales de España del Ministerio de Información y Turismo y sigue estrenando nuevas obras como Concierto andaluz de Joaquín Rodrigo, ballet en un acto y tres movimientos, donde sigue la tónica de sus últimas creaciones jugando con simbolismos en la danza.
En el VII Festival de la Opera de Madrid de 1970, se consideran estreno mundial las piezas Torre bermeja y Córdoba que dedica a Isaac Albéniz, y Danza de la gitana y Primera de «La vida breve» a De Falla. También la estampa colonial del siglo XIX llamada Cubana.
Después de La Nueva Cenicienta, película que rodó junto a Marisol, en 1972 graba para Televisión Española El sombrero de tres picos, dirigido por Lazarov. Durante este rodaje, Antonio fue acusado de blasmefar y se le condenó a dos meses de cárcel, aunque las reacciones expresadas por gobiernos de otros países influyeron para que saliera a los dieciocho días.
A lo largo de su vida, Antonio intervino en varias películas, algunas veces como protagonista total, en otras actor-bailarín, otras simplemente bailarín, interpretando sus ballets y en una ocasión, solamente como coreógrafo. En 'Ley de una Raza' de 1969, dirigida por José Luis Gonzalvo comparte rodaje con La Chunga.
En 1978, pensando ya en retirarse, prepara una gira de despedida con el espectáculo Antonio y su Teatro Flamenco, formado por un grupo reducido de artistas. Comienza por Sevilla en el Teatro Nacional de Lope de Vega. Lleva una selección de flamenco en sus dos versiones, popular y teatral. El espectáculo se inicia con un preludio entre guitarristas y cantaores; sigue el mirabrás, tarantos bailados; La sangre derramada, carcelera; En el puerto, tangos de Málaga, martinete, bulerías, la caña, granainas, Resurrección de la petenera, La casada infiel y concluye con alegrías, tanguillos de Cádiz, fandangos rocieros y se despide por sevillanas.
En 1979, hace su retirada profesional como bailarín en la ciudad japonesa de Sapporo, justo cuando se cumplen sus bodas de oro con la danza.
En marzo de 1980, por su largo y brillante historial como bailarín y coreógrafo, es nombrado director artístico del Ballet Nacional Español del Ministerio de Cultura. El repertorio que presenta es variado con obras de otros maestros, alternando con las más famosas suyas. Después de dos años largos de actividad, el 9 de mayo de 1983 es cesado en el cargo por razones muy controvertidas en su día. Antonio deja por el momento toda actividad relacionada con la danza.
El nombramiento, en 1983, de María de Avila como responsable de los dos Ballets nacionales produjo su forzada salida, cuestión que llevaría a los tribunales con el ánimo de recuperar el puesto directivo del Ballet, pero que no consiguió. En el último cambio de dirección de la compañía, Antonio tuvo de nuevo la esperanza de volver a dirigirla, hecho que tampoco se produjo.
En 1987, se presta a hacer a María Rosa una coreografía sobre la Romería del Rocío que presenta en ese año en el Teatro Monumental de Madrid.
En 1989 anunció que volvía a bailar pero una lesión en la muñeca le hizo desechar tal idea.
María Rosa ultimaba nuevos planes para su compañía, después de haber visto reestrenadas en el Ballet Nacional sus creaciones en repertorio. Tenía elaborado el proyecto de un gran ballet sobre Colón, que esperaba poner en escena durante 1992 en Sevilla, pero no pudo ser.
Antonio falleció el 5 de febrero de 1996 a los 74 años en su domicilio de Madrid víctima de una trombosis cerebral. Se estaba recuperando desde hacía dos años de una hemiplejia, pero su estado de salud empeoró en los últimos días. Fue enterrado en el Cementerio de San Fernando de Sevilla.
Tras la marcha de Antonio, el bailarín más célebre y trascendental de la danza española, quedó su deseo expreso de que su estudio madrileño se convierta en un centro cultural para danza, y se instituya tanto una fundación como un premio de baile español que lleven su nombre.
Carmen Roche, ingresó a los 13 años en el Ballet de Antonio. Se formó con él compartiendo grandes éxitos y giras internacionales. Tantos años de relación, el respeto y la admiración que por él sentía la empujaron en su intento de salvar el mítico estudio de danza donde tantas horas habían trabajado. Trás un año de obras y un titánico esfuerzo, el deseo de Antonio y Carmen Roche se cumplió a finales de 2007 principios de 2008. Se consiguió recuperar el estudio de danza de Antonio Ruiz Soler.
Desde el 29 de abril de 2009 (Día Internacional de la Danza) Antonio cuenta con una placa en su memoria en la calle donde estaba situado su estudio de baile (c/ Coslada nº 7), y que actualmente acoge la Escuela de Baile de Carmen Roche SCAENA en el distrito de Salamanca.
Fuentes: elmundo.es (Cristina Marinero), danza.es, scaena, wikipedia
Fotografía: elmundo.es
Merche Esmeralda con el Ballet Nacional de España
La bailarina Merche Esmeralda celebrará junto al director del Ballet Nacional de España, José Antonio Ruiz, el 30º aniversario de la compañía en tres semanas que se llenarán de auténtico arte clásico y flamenco. El acontecimiento se realizará en septiembre y contará con la presencia de numerosos profesionales de la danza y el flamenco entre los que se encuentra la aclamada intérprete sevillana, que comenzó a trabajar con el Ballet Nacional en 1980 requerida por el mismísimo Antonio.
Merche Esmeralda interpretará a la sacerdotisa griega Medea, que según confiesa representa uno de los papeles más hermosos que ha hecho en su vida. "Es un personaje muy duro sentimentalmente, con unas expresiones y comportamiento que cambian de un segundo a otro, pero que a la vez es muy agradecido y aplaudido por el público".
La bailaora se encuentra muy ilusionada con esta nueva oportunidad de subirse a los escenarios ya que para ella es "una manera de retomar el contacto con el mundo del ballet y con ese ambiente que me ha dado tanto". El aniversario contará, en sus dos primeras semanas, con las piezas de clásico español que han hecho importante al Ballet Nacional, repartidas en pasos de a dos, y en los últimos siete días habrá momentos flamencos entre los que se podrá disfrutar de una soleá en el cuerpo de Merche Esmeralda.
El hecho de volver a trabajar con José Antonio es para la bailarina uno de los pilares más importantes de esta celebración ya que lo considera un bailarín "muy profesional y con un gran conocimiento del espacio, del ritmo, del cuerpo y de la danza". Una danza, la de Merche Esmeralda, que si por algo se caracteriza es por la elegancia que proyecta. "Mi baile es muy personal, mi estilo no es un flamenco de mucha violencia, es más tranquilo pero no exento de fuerza", asegura la sevillana.
Estos días, Merche Esmeralda ha impartido un taller de flamenco en el marco de los cursos de verano que organiza la Fundación Universidad Rey Juan Carlos en Aranjuez y, a pesar de que nunca dejará de bailar en los escenarios, piensa que "es un lujo poder transmitir lo que siento al bailar y lo que me han aportado todos los personajes maravillosos que he interpretado. Para la artista, "el flamenco es una forma de vivir, de sentir, de amar,... y de una manera u otra siempre estará en mí".
Fuente: diariodesevilla.es
Merche Esmeralda interpretará a la sacerdotisa griega Medea, que según confiesa representa uno de los papeles más hermosos que ha hecho en su vida. "Es un personaje muy duro sentimentalmente, con unas expresiones y comportamiento que cambian de un segundo a otro, pero que a la vez es muy agradecido y aplaudido por el público".
La bailaora se encuentra muy ilusionada con esta nueva oportunidad de subirse a los escenarios ya que para ella es "una manera de retomar el contacto con el mundo del ballet y con ese ambiente que me ha dado tanto". El aniversario contará, en sus dos primeras semanas, con las piezas de clásico español que han hecho importante al Ballet Nacional, repartidas en pasos de a dos, y en los últimos siete días habrá momentos flamencos entre los que se podrá disfrutar de una soleá en el cuerpo de Merche Esmeralda.
El hecho de volver a trabajar con José Antonio es para la bailarina uno de los pilares más importantes de esta celebración ya que lo considera un bailarín "muy profesional y con un gran conocimiento del espacio, del ritmo, del cuerpo y de la danza". Una danza, la de Merche Esmeralda, que si por algo se caracteriza es por la elegancia que proyecta. "Mi baile es muy personal, mi estilo no es un flamenco de mucha violencia, es más tranquilo pero no exento de fuerza", asegura la sevillana.
Estos días, Merche Esmeralda ha impartido un taller de flamenco en el marco de los cursos de verano que organiza la Fundación Universidad Rey Juan Carlos en Aranjuez y, a pesar de que nunca dejará de bailar en los escenarios, piensa que "es un lujo poder transmitir lo que siento al bailar y lo que me han aportado todos los personajes maravillosos que he interpretado. Para la artista, "el flamenco es una forma de vivir, de sentir, de amar,... y de una manera u otra siempre estará en mí".
Fuente: diariodesevilla.es
Suscribirse a:
Entradas (Atom)